“La naturaleza nos devuelve lo que le damos”

Hoy, como cada 29 de Agosto desde 1900, se celebra el Día del Árbol, una fecha pensada por el Dr. Estanislao Zeballos para concientizar sobre la necesidad de proteger las superficies arboladas, frenar los efectos del cambio climático y la tala indiscriminada. Justamente en la provincia de San Juan, esta planta se transforma en una de las principales fuentes de vida, ya que no sólo abastece de oxígeno a los habitantes sino, también, de su tan preciada sombra que los protege del crudo sol en verano.

“La Pampa es como nuestra República, tala rasa. Es la tela en la que ha de bordarse una Nación. Es necesario escribir sobre ella ¡Árboles! ¡Planten árboles!”, dijo en un discurso Domingo Faustino Sarmiento. Y al día de hoy, sigue siendo necesario reflexionar sobre sobre la importancia de estos gigantes verdes.

“Pensemos que el árbol en la ciudad conforma un bosque urbano. Este, es la columna vertebral sobre la que debe construirse todo el ecosistema para poder ser armonioso”, explicó a Diario Huarpe el Director de Arbolado Público, Héctor Bustamante.

El especilista detalló particularmente cuáles son los beneficios que estas plantas de gran porte le brindan a la sociedad: Dan oxígeno, son reguladores térmicos del ambiente y captan el polvo ambiental, algo de vital importancia para quienes son alérgicos. Desde el punto de vista psicológico, hacen más agradable al entorno en el que se vive, un claro ejemplo de ello es la parquización y forestación de la Av. De Circunvalación. Por último, Bustamante mencionó el valor de los árboles en relación a la sustentabilidad. En este sentido, ayudan a generar condiciones para la utilización de vehículos alternativos, como la bicicleta, y a reducir la utilización de aires acondicionados, por ejemplo.

Al ser consultado sobre el estado del arbolado público en el Gran San Juan, Héctor Bustamante afirmó que “es difícil dar una respuesta general ya que son seres vivos. Pero teniendo en cuenta las condiciones climáticas y geográficas de nuestra provincia, podemos decir que aquí los árboles son grandes sobrevivientes”, indicó el especialista. Si bien reconoció que algunos ejemplares tienen problemas, explicó que se está trabajando en ello y que se trata de problemas en los que no sólo debe intervenir una determinada entidad pública, sino también los vecinos.

“Aquí los arboles son grandes sobrevivientes”, indicó Héctor Bustamante sobre el estado del arbolado púbico. 

Héctor Bustamante, Dir. de Arbolado Público de San Juan.

Martín Hadad, biólogo e investigador del CONICET coincidió con Bustamante al afirmar que el estado de los árboles es “muy bueno”. Él, junto a un equipo de profesionales, se encuentra actualmente trabajando en un estudio dendrocronológico de una muestra de plátanos del centro de San Juan. Dicha investigación arrojó el resultado anteriormente mencionado, aunque también puso en evidencia que la sequía de los últimos años y la falta de riego ha dejado secuelas en los especímenes.

Fuente de vida que todos deben cuidar

“Uno de los principales problemas que tiene el arbolado en San Juan es el tema del riego. Contamos con temperaturas muy extremas que causan estrés en la planta, lo que la lleva a secarse muy rápidamente si no cuenta con los cuidados necesarios, explica el investigador del CONICET, Martín Hadad. Ante esto, Héctor Bustamante, Director de Arbolado Público, reconoció que es un problema en el que se está trabajando actualmente.

Martín Hadad en biólogo e investigador del CONICET. 

¿Qué se necesita para que un árbol crezca sano y fuerte? Ambos especialistas consultados coincidieron en su respuesta:

Lo primero a tener en cuenta es que, si se va a plantar, deben tenerse en cuenta un gran número de factores, no sólo el estético. El tamaño de la vereda y el sistema de riego, son algunos de los que van a influir en la elección acertada de la especie.

En cuanto al agua, este es un punto fundamental. Las temperaturas extremas de nuestro clima y la escasez de lluvia hacen que el riego sea un elemento clave en la sanidad de los árboles.

La poda es otro de los problemas con los que los especialistas deben luchar diariamente. “Tiene que ver con una asociación del árbol de la puerta con el que se hace en los parrales o frutales”, explicó Bustamante al indicar que muchas veces se poda más de lo necesario y se termina dañado a la planta. “Es totalmente contraproducente”, afirmó el Director de Arbolado Público, y añadió que se trata de un aspecto cultural que se debe modificar.

“Un árbol árbol bien forestado, ciudado y mantenido no va a generar ningún problema en su entorno. La naturaleza nos devuelve lo que le damos”.

Con esa frase Bustamente se refirió a los problemas que algunas especies generan, como levantamiento de veredas o rotura de cañerías.

Árboles que sí, árboles que no…

“Depende de los gustos pero un árbol que se adapta bien, crece rápido, da buena sombra y no necesita muchos cuidados es la acacia visco, una planta nativa de la zona. Otra es la grevillea, la tipa, o las nativas del monte, como el algarrobo”, explicó Martín Hadad.

Por su parte, Héctor Bustamante, afirmó que es difícil ser categóricos al definir que árboles deberían plantarse y cuáles no. Dicha selección debe hacerse teniendo en cuenta factores del entorno en el cual se van a insertar. En este sentido, si se cuenta con una vereda ancha, una buena tasa y una cuneta por donde pasa agua, podemos plantar especies de gran porte como el plátano o la tipa. En veredas angostas, lo más recomendable podría ser el fresno o la mora tartárica (una variedad con brotes rectos).

Finalmente, el especialista afirmó:

“Es fundamental elegir la especie adecuada. Lo que no podemos hacer es plantar hoy el problema de mañana”.