Provinciales > Con una placa
Reconocieron a los realizadores del proyecto del Centro Cívico
Conocé parte de la historia de este edificio, que comenzó a realizarse en 1973, a través de las palabras de uno de los ingenieros encargados del proyecto.
POR REDACCIÓN
En el mediodía del lunes, se colocó una placa en el Centro Cívico. La misma fue en reconocimiento a los realizadores del proyecto arquitectónico y cálculo estructural del edificio.
En representación de los profesionales que llevaron a cabo la obra, hizo uso de la palabra el ingeniero Roberto Nafá, quien habló en “nombre de los ingenieros Gil Enrique, el mío, José Leonidas Sarmabide y Edgar Barro, quien ya está en el cielo”. Continuó diciendo “todas estas cosas se logran por la suma de grandes esfuerzos”.
El ministro de Infraestructura y Servicios Públicos, Julio Ortiz Andino estuvo presente en el acto y dijo que “la modernidad del edificio nos hace quedar bien en todos lados”. Además agregó “felicitaciones de parte de toda la ingeniería de la provincia porque ha sido algo fantástico”. “Fue algo calculado antes del terremoto del 77 y acá lo tenemos perfectamente estable y seguro”, comentó Andino.
El gobernador Sergio Uñac expresó su opinión y dijo que “las sociedades deben poner en valor las cosas que han hecho sus propios integrantes”. Agregó “esto definitivamente ha servido para marcar un icono de lo que es hoy la provincia de San Juan”.
Además, reconoció a aquellos que permitieron que la obra se hiciera. “Un sueño que empezó en la década del 70 se terminó concretando en el 2010”, comentó el gobernador.
Un poco de historia
Roberto Nafá, uno de los ingenieros del proyecto del Centro Cívico, trajo los recuerdos de los primeros años de construcción del edificio a su memoria. “En aquel momento los cuatro ingenieros junto con los arquitectos, en la parte de estructura, lo hicimos todo a pulmón”, comenta.
“Usamos una reglita de cálculo que era una especie de computadora plástica. El tamaño de los planos era tan enorme que no cabía en los tableros. Los 4, que teníamos entre 27 y 30 años, tirados en el suelo trabajábamos con goma, lápiz y escuadra”, recuerda Nafá.
Se mostró admirado ante “este monumento de 80mil metros cuadrados” que se realizó en el año 1973.
Además, dio a conocer un hecho importante que marcó su memoria, el día en el que hubo un incendio en el lugar. Según cuenta Nafá, el norte del Centro Cívico fue envuelto en llamas en un “día de zonda con un 3% de humedad, condiciones óptimas para el incendio”. En la parte de arriba los hierros se soldaban, así que “parece que un grupo de chispitas cayeron en el aserrín y se incendió”, contó el ingeniero. Agregó que “la mano de Dios y un cambio de viento hizo que no continuara”. Explicó que “no le pasó absolutamente nada porque lo que se quemó fue una especie de cáscara que uno prevé en la estructura”.
Algo que recuerda Nafá fue el día de la inauguración. Quedó marcado en su memoria ya que un ingeniero lo invitó a subir al último piso.
“Me senté en un banquito, recé un Padre Nuestro y me acomodé el esqueleto porque era demasiada la emoción”, finaliza uno de los encargados del proyecto del Centro Cívico.
