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Provinciales > Comidas tradicionales

Sabores con identidad

Los platos típicos de un lugar sirven para conocer a un pueblo ya que sus sabores y olores hacen a su acervo. Aquí algunos de los platos más conocidos de las gastronomía local.

POR REDACCIÓN

03 de junio de 2018

La gastronomía de un lugar es uno de los factores más identitarios y que sirve para conocer realmente a un pueblo. Es que lo que un pueblo come tiene que ver con su historia, con su economía y sobre todo con la herencia cultural que se transmite en una sucesión infinita de generaciones.

Pues bien, en medio de este relato de identidad a través de la gastronomía, surge la pregunta de cuál o cuáles son los platos típicos de las mesas de los sanjuaninos. En efecto, hay una serie de comidas, olores y sabores que, casi sin darnos cuenta, nos han ido acompañando a lo largo de nuestras vidas.

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El cheff Mauricio Barón explicó que hay una gran cantidad que forman parte de la tradición local. “Muchos son originarios de San Juan y otros provienen de recetas que también se utilizan en otros lugares, pero aquí le hemos puesto nuestra impronta”, aseguró el cheff.

Igualmente a la hora de hacer una lista de los platos tradicionales de la gastronomía sanjuanina se puede definir una serie de comidas consideradas como las más populares. Los platillos que todos hemos probado alguna vez. Barón elaboró un top five con los platos más populares.

El primer puesto se lo lleva la carne asada, específicamente la punta de espalda. Se trata de un corte de ternera característico de la provincia de San Juan, no solo porque se realiza aquí sino porque tiene la forma del mapa de la provincia.

La pieza suele tener un peso aproximado de 3 kilogramos y se ubica por encima de las costillas y debajo del matambre. Este corte de carne se encuentra, casi de manera exclusiva, en San Juan ya que en el resto del país suele cortarse junto con las tiras de asado o costillas.

El segundo puesto del ranking lo ocupan las empanadas sanjuaninas. Conocidas en todo el país por ser muy jugosas y sabrosas, las empanadas sanjuaninas tienen carne molida, huevo aceitunas y una cantidad generosa de cebolla. Hay quienes dicen que el secreto de la empanada local está en la cebolla que debe estar siempre bien cocida.

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El puesto tres del listado de comidas locales lo ocupa la carbonada. Este guiso tradicional incluye carne vacuna, papa, cebolla, zapallo, zanahoria y choclos, todos los ingredientes van a un sofrito primero y luego se les agrega agua y fideos o arroz.

El cuarto lugar está el machacado, otro guiso tradicional, aunque con menos ingredientes que la carbonada. “Esta era la especialidad de mi abuela”, recordó Barón. El primer paso es rehogar una cebolla, luego se le agrega agua y carne machacada (puede ser carne destrozada con un martillo de cocina o molida pisada con un tenedor para lograr romperla en trocitos), papas cortadas en cubos pequeños y arroz. La preparación no se debe servir muy espesa.

El quinto puesto lo ocupa la cazuela de gallina. El primer paso es colocar la gallina a cocinar junto con una cebolla y ajo. Luego se le agregan papas cortadas en cubos y, por último, el arroz.
Otras preparaciones que ocupan un lugar destacado en las mesas locales son el tomaticán, humita y queso de cabra, entre otras delicias.

Para después de almuerzo

Una vez terminada la comida llega la hora del postre aquí un clásico es el dulce de membrillo. En todo el país se come dulce de membrillo, pero el sanjuanino se destaca por ser más rubio que el resto. Tal es la diferencia que el producto local ya consiguió la denominación de origen. Siguiendo con los dulces el de alcayota con o sin nueces es un considerado un clásico.

La sopaipilla dulce o salada nunca puede faltar. Se trata de una masa de harina de trigo que es frita en aceite o grasa. Hay diferentes teorías sobre el origen del término pero la más aceptada marca que la palabra proviene del vocablo sopaipa que, a su vez, viene del romance andalusí xopaipa que significa “pan mojado en aceite”.

Por último, la semita es otro emblema de la provincia. Es que esta tortita de harina con grasa y chicharrones ya es un clásico de todas las mesas. Hasta se han llegado a organizar concursos para determinar quién hace la mejor semita.

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