Mirá cómo les cambió la vida a los Altamirano Bravo de 9 de Julio

Dicen que el número siete es un número maravilloso; y para la familia Altamirano Bravo no está lejos esa idea.

Es que después de siete años de presentar papeles y golpear puertas en diferentes organismos del estado provincial y municipal, el siete de enero le informaron que al otro día los mudaban a la nueva casita. Toda una alegría que se suma a la llegada de su séptimo hijo.

“Este sí que vino con la casita bajo el brazo”, le dijo a DIARIO HUARPE Darío Altamirano, el jefe de la familia nuevejulina

“No tenemos más que palabras de agradecimiento a todas las personas que hicieron esto posible y principalmente al intendente que escucho”.

El núcleo familiar lo completan Carolina Bravo (su esposa que para los primeros días de marzo espera su séptimo hijo); Guadalupe (10 años); Gustavo (9); Vanina (7); Agustín (6); Santiago (4) y Martina (1).

Darío es trabajador rural y la viene remando como puede.

“Hay meses que en el campo no hay trabajo y hay que salir a buscar el pan como y donde se pueda”, contó Darío

“Pero ahora un poco más tranquilo, porque la casa ya no se va a llover”.

Si bien el módulo (una habitación, un baño y una cocina comedor), no es el ideal para la cantidad de ocupantes (próximamente 9), el hecho de no lloverse, de caminar sobre un piso de cemento, de bañarse y hacer las necesidades en un baño que está dentro de la casa, cambia radicalmente la perspectiva para cualquiera.

“La idea, a medida que vaya entrando algo de platita, es ampliarlo para que todos estemos más cómodos”, dijo Carolina, que sueña con al menos dos habitaciones más como para que los varones y nenas tengan su propio espacio.

El antes y el después en foto

Una politica de estado con sentido común

“No podían seguir viviendo en esas condiciones extremas” empezó diciendo el intendente Gustavo Núñez

y luego siguió

“Cuando nos enteramos de la situación enviamos a personal del área social para relevarlos y la verdad que la asistencia debía ser urgente por la cantidad de pibes”.

En este marco el jefe comunal contó que la meta de su gestión es atender y solucionar estas situaciones de precariedad absoluta en la que viven muchos nuevejulinos.

“En lo que llevamos de gestión con fondo municipales hemos mejorado la situación habitacional de casi mil familias de 9 de Julio”, aseguró Núñez

“Hemos reparado techos, hemos erradicado letrinas, hemos construido módulos, hemos dado materiales de construcción para ampliaciones y reconstrucciones; en fin, siempre buscando que los que menos tienen estén un poquito mejor”.

Lo que viene

Como están las cosas en materia económica financiera, desde el municipio contaron que se está analizando y planificando el nuevo plan de trabajo para este 2018. No obstante aseguraron que ya está todo hablado con los directivos del IPV para que muy pronto se empiecen a construir, con fondos provinciales, más de 100 viviendas en el departamento.

“Desde luego esperamos con ansias esto porque los módulos habitacionales y los programas de arreglos de viviendas son solo un paliativo a las urgencias habitacionales que tenemos en el departamento”, dijo Núñez