Buena iniciativa
El gobierno nacional promulgó la ley de Energía Distribuida
A través de esta normativa se regula el Régimen de Fomento a la Generación Distribuida de Energía Renovable Integrada a la Red Eléctrica Pública.
POR REDACCIÓN
Por Leandro Gómez Tejada*
Como pasa en otros países más avanzados en materia de energía renovables, la ley busca incentivar la generación de energía mediante el uso de dispositivos de fuentes renovables como la fotovoltaica y eólica por parte de los consumidores y poder inyectar a la red eléctrica el excedente.
Uno de los puntos más importantes de la ley es el Fondo Para la Generación Distribuida de Energías Renovables (FODIS), el cual a través de una partida presupuestaria ya dispuesta para 2019, que fija un monto al que el Tesoro Nacional destinara en el primer año un monto de $500 millones. Este podrá proveer facilidades para la adquisición de este tipo de tecnologías mediante la entrega de préstamos, bonificaciones y subsidios a la tasa de interés, otorgar incentivos a la inyección o bonificaciones a la adquisición, también financiar la difusión e investigación relacionada a las renovables.
Hasta el momento no se sabe bien cómo van a ser aplicados estos beneficios, pero el gobierno habilitó un portal en donde se pueden consultar los diferentes aspectos: https://www.argentina.gob.ar/energia/generacion-distribuida
Otra de las cosas a resaltar es la creación de un fondo para el fomento de la industria nacional asociada (FANSIGED), cuyas actividades serán “investigación, diseño, desarrollo, inversión en bienes de capital, producción, certificación y servicios de instalación para la generación distribuida de energía a partir de fuentes renovables”.
Asimismo, el diputado oficialista y promotor de la ley expreso al portal Energía Estratégica, Juan Carlos Villalonga: “Mi expectativa es que para el 2030 la generación distribuida ya represente una potencia instalada de alrededor de 1000 MW. Esto arrancará de la mano de las PyMES y establecimientos agropecuarios que encontrarán en la distribuida un modo de achicar su cuenta energética. Será una aliada para las economías regionales de todo el país”
De esta manera, la ley trae aparejado un cambio de paradigma en lo que se refiere al uso de energía eléctrica, siendo el consumidor un sujeto proactivo y transformándose en un Prosumidor, es decir, usuarios que consumen y a la vez producen energía.
Si bien hay muchos desafíos que hay que sortear, como los altos costos de estas tecnologías, que año a año van bajando sus precios, esto trae aparentemente un beneficio a largo plazo tanto, para los bolsillos de los consumidores, como para el medio ambiente y el reemplazo paulatino de energías provenientes de recursos fósiles.
*Estudiante de Cs. Politicas en la UNTreF, miembro del Observatorio Geopolítico de la Energía y Soberanía.