Massa destacó el rol de los medios para que la sociedad se informe

– Las amenazas recibidas por Germán de los Santos, corresponsal de La Nación, se suma a otras intimidaciones similares contra periodistas y son la punta de un gigantesco iceberg -el narcotráfico- que amenaza la gobernabilidad en la Argentina y que no ocupa un lugar relevante en la agenda del oficialismo ni de los candidatos presidenciales.

– Creo que no está fuera de la agenda de los candidatos pero creo que tiene que estar en la agenda de las políticas de estado. La lucha contra el narcotráfico no tiene que tener una bandera política sino una decisión de todos los partidos y de toda la sociedad para transformarlo en una política de estado. Argentina no puede seguir sin ley de derribo ni con una frontera con tanta porosidad. Para eso es imprescindible que el Ejército colabore con Gendarmería , tal como lo prevé la ley de seguridad interior. Como así también que la Armada colabore con Prefectura. Además necesitamos aprobar un paquete de leyes que están en el Parlamento. Algunas las propusimos nosotros y otras el radicalismo. La extinción de dominio prevé la posibilidad de que el Estado le quite la nuda de propiedad de los bienes a aquellos que trafican y también a los que lavan. Esto permite atacar lo más importante para el narcotráfico, que es el dinero. El desafío es aprender las mejores experiencias de cada país. Compartimos muchas jornadas con (Oscar) Naranjo, quien llevó adelante la lucha contra el narcotráfico en Colombia. Venimos trabajando desde febrero en capacitación e intercambio con la DEA. También los temas de persecución de activos con un especialista de Naciones Unidas. Hay un documento que el año pasado firmó la mayor parte de las fuerzas políticas argentinas surgido a partir de una convocatoria que hizo la Iglesia y que hay que llevar a la práctica.

– En el congreso de Fopea dijo que un presidente debería dar conferencias de prensa una vez por mes. Asumimos que se trata de un compromiso asumido.

– Claro, absolutamente.

– Los legisladores del Frente Renovador presentaron un proyecto de regulación de publicidad oficial. ¿Qué otros ejes de política comunicacional tienen, como medios públicos o acceso a la información?

– Uno puede armar cualquier ingeniería jurídica alrededor del sistema de medios, pero lo primero que tiene que haber es decisión política. Creer que la mejor forma en que la sociedad puede elegir libremente es teniendo información. Cuando tiene contacto con la realidad a través de los medios de comunicación, tiene la tranquilidad de poder abordarla y modificarla. Son además un termómetro adicional al contacto con la gente. Hay cuatro o cinco cosas que deben garantizarse. Por un lado, la imparcialidad del sistema de medios públicos. Por otro, la viabilidad de la difusión a partir de una regulación de la propaganda oficial. Luego hay temas que tienen que ver con abusos. Ver los entretiempos de Fútbol para todos a esta altura ya causa gracias porque es ver a los funcionarios haciéndose selfies. Esos minutos que tiene el Estado deberían aprovecharse para campañas sobre HIV, de vacunación, de prevención en seguridad. También es importante adaptar la legislación argentina a la realidad actual, la de las plataformas convergentes. Tenemos que entender que vivimos en una sociedad de las imágenes en la que la información fluye a través del teléfono celular, la televisión, el Ipad o la computadora. Debemos aprehender esa información y tratar de ayudar a mejorar la realidad, todos los días, desde el gobierno.

– Descalificó el proyecto oficial de telecomunicaciones diciendo que seguía el modelo venezolano. La ley medios no tiene en cuenta a Internet. ¿Qué cree que debe impulsarse en esta área?

– La Argentina tiene que aprender que las cosas que funcionan las tiene que cuidar y a las que no funcionan las tiene que cambiar. Y las que no tiene, las tiene que encarar. Eso implica la construcción de un país normal, serio. En materia de telecomunicaciones y en materia de medios de comunicación lo primero que tenemos que mirar es donde viaja hoy la información. A partir de ahí ver cómo logramos capilaridad de la arquitectura de redes, ya sea por sistemas satelitales o redes físicas. Todo terminará convergiendo en un único sistema de comunicación. Lo que debemos garantizar es la libertad de ese sistema y la capilaridad, que es la profundidad. Cuando un jujeño de la Puna y un porteño de Palermo tengan el mismo nivel de información estaremos en un país realmente libre.

– ¿Cuáles son sus críticas específicas al proyecto de telecomunicaciones?

– La primera es que es incongruente, por un lado, licitar espectro y planteando un esquema de inversiones. Y por otro, estar cambiando en la misma ley la licitación que se está llevando adelante. Las condiciones planteadas en la licitación del espectro son unas y las condiciones que surgen, en términos de precio y de mecanismo de transmisión de datos, son otras. Lo que tenemos que lograr en materia de espectro, es que se transforme en precio y calidad de servicio para el ciudadano. Eso significa que hay que habilitar la posibilidad de ocupación de espectro de acuerdo al nivel de inversión para velocidad de la información y de acuerdo a la tarifa que se le brinde al ciudadano. Eso nos permitirá superar algo increíble que ha logrado la Argentina. Transformó la telefonía móvil en telefonía fija: para hablar por celular tenés que quedarte quieto.

Entrevista de Daniel Dessein/Foto ©ADEPA.