La Federal detuvo al único prófugo del mayor caso de corrupción de España

La Agencia Regional Cuyo de la Policía Federal logró dar con el hombre de 49 años identificado co­mo Carlos Fernández Gámez, quien es el único prófugo del caso que tuvo más de 100 imputados y la mitad de ellos detenidos en España. Estaba en una vivienda de Rivadavia cuando la policía lo encontró.

Carlos Fernández ingresó al país en el año 2006, probablemente con documentación falsa o con la anuencia de algún funcionario que podría haber utilizado algún contacto para permitir su ingreso, pese al pedido de captura internacional que pesaba sobre él.

El Juzgado de Instrucción número 5 de Marbella ha recibido la comunicación formal por parte de la In­terpol de la detención del exconcejal Carlos Fernández en Argentina, según confirmaron fuentes del Tri­bunal Superior de Justicia de An­dalucía.

La detención de Fernández tiene lugar después de que el titular del Juzgado de Instrucción número 5 de Marbella rechazara la representación de su hermano, el letrado An­tonio Fernández, en el procedimiento por la corrupción político urbanística de Marbella, causa por la que estaba en busca y captura desde finales de junio de 2006. Esa decisión, después avalada por la Audiencia de Málaga, cerraba las puertas a la posible prescripción de los delitos por los que fue procesado en Malaya.

Carlos Fernández desapareció justo cuando la policía trataba de detenerlo por su implicación en la corrupción de Marbella. En aquellos días comunicó que se encontraba recorriendo el Camino de Santiago, pero que volvería para ponerse a disposición de la autoridad judicial. La promesa nunca la cumplió y su paradero fue un misterio hasta ayer. Du­rante estos años se especuló conque su escondite estaba en Ma­rrue­cos, Argentina e incluso Vene­zuela, pero nunca se encontró ninguna prueba de ello.

El exconcejal jugó un papel significativo en la última etapa del gilismo en Marbella. Como portavoz del gru­po andalucista, llevó a su formación a pactar con los concejales cercanos al GIL y con tres ediles socialistas para forjar la moción de censura que desalojó a Julián Muñoz de la alcaldía. El auto de procesamiento dictado en su momento por el juez instructor del caso Malaya, Miguel Án­gel Torres, indicaba que había recibido sobornos cuantiosos del poderoso asesor de urbanismo del GIL, Juan Antonio Roca.

QUÉ FUE LA OPERACIÓN MALAYA

Famosos y funcionarios presos

La “Operación Malaya” fue el escándalo de corrupción municipal más grande de la historia de España. Casi 100 imputados y la mitad de detenidos, hasta la estrella internacional Isabel Pantoja, quien era pareja de un exalcalde involucrado en el caso. Quedó presa en 2007 por la red de tráfico de influencia, sobornos y blanqueo de capitales.

Este caso involucró a alcaldes, concejales, empresarios de la construcción y ricos ilustres. El cimbronazo político fue tan grande que se disolvió el Ayuntamiento de Marbella.

Además de caer presos, la Justicia avanzó sobre los bienes de los implicados, que fueron rematados en la web. Mil pisos en Murcia, dos hoteles, dos helicópteros, campos, 60 caballos de pura raza y obras de arte; hasta un cuadro de Joan Miró que estaba en el baño de la mansión de uno de los principales detenidos.

Detectives de la División Crimen Organizado y Trata de Personas de la Policía Federal detuvieron al exconcejal español Carlos Fernán­dez Gámez a raíz del pedido de captura internacional de la Justicia de su país desde 2012, acusado de estafar al Estado de Marbella por más de 300.000 euros.

Carlos Fernández Gámez estuvo viviendo en la Ciudad de Rivadavia y se sospecha que habría tenido protección de alguien en este país.

Para cambiar su fisonomía se había realizado varias cirugías en el rostro. Su destino ahora sería la cárcel.

La ministra de Seguridad de la Na­ción, Patricia Bullrich, dijo que el procedimiento fue gracias a un trabajo conjunto entre la Justicia de España, la de Argentina y la Policía Federal.