Tercero de Instrucción
Su padrastro la violaba delante de su hermanita pero su mamá nunca le creyó
La nena padeció los ultrajes de su padre a partir de los diez años hasta los 14, a veces delante de su hermanita cuatro años menor. Su mamá también fue denuncia, pero por otro delito.
POR REDACCIÓN
Las hermanitas de diez y cinco años se mudaron con su mamá a la casa de Capital del imputado por abuso sexual en el año 2014. Ella empleada de una fuerza pública y él empleado de un sindicato tuvieron una convivencia normal con las niñas durante un año hasta que comenzaran los golpes y las vejaciones con la mayor de las niñas.
Dos nenas con su mamá y su padrastro experimentaron un año de convivencia con total tranquilidad en una vivienda de Capital hasta que el hombre (34 años) empezó a golpear a las criaturas y abusar de la mayor de ellas, inclusive algunas veces, delante de la más pequeña.
Las nenas advirtieron a su mamá de la acción depravada de su pareja, pero la mujer no les creyó e inclusive también empezó a golpearlas, aun cuando antes nunca lo había hecho.
El padrastro atacó sexualmente a la más grande por primera vez cuando la menor tenía 10 años y perduró hasta los 14. Tuvo la idea de hasta violarla y lo concretó, en dos oportunidades los abusos sexuales fueron observadas por la hermana menor porque fueron cometidas delante suyo cuando tenía 10 años, señalaron fuentes judiciales.
La nena, víctima de la salvajada de su padrastro, se quebró el 28 de agosto de este año y mandó un mensaje de texto a su tía, quien radicó la denuncia en el centro ANIVI.
Un mes después de comenzada la investigación del Tercer Juzgado de Instrucción, 3 de septiembre pasado, el juez Guillermo Adárvez entendió que quedaron acreditados los delitos de abusos sexuales contra la ahora joven de 14 años y la corrupción de menores con la hermana, de 10 años de edad. Por eso determinó procesar a J.J.E.R. (se reserva su identidad para resguardar la identidad de sus presuntas víctimas, menores y parientes del mismo) por el delito de abuso sexual gravemente ultrajante doblemente agravado por la convivencia y por estar encargado de la guarda y la educación de la menor y corrupción de menores (en el primer caso) y también la corrupción de su hermana menor, sólo por el hecho de haber presenciado al menos dos de esos episodios.
La Justicia dictó la prisión preventiva para el procesado, lo mandó al Servicio Penitenciario Provincial y le trabó un embargo de $500.000, indicaron los voceros de Tribunales.
J.J.E.R. se declaró inocente en su indagatoria y atribuyó todo a su intención de querer poner límites en la casa. Pero, el informe del médico que revisó a la mayor de las chicas y los psicólogos que entrevistaron a ambas en el Centro ANIVI, terminaron por complicar su situación.
El médico legista determinó que la joven tenía lesiones en la vagina y los especialista de la psiquis establecieron que las chicas no mentían, además la adolescente de 14 años tenía indicios de haber sufrido un abuso y tendencias al suicidio.