El Papa Francisco hizo una fuerte confesión que dejó a los argentinos enormemente ilusionados. En su encuentro con el padre Pablo Viola, se sinceró sobre lo que siente por Argentina.

Según manifestó el fiscal Mario Panetta, en el inicio del segundo juicio contra el religioso, para no ser descubierto, el cura Walter Bustos le pidió a al menor que se confesara en otra provincia.

“Tres luquitas para el sanguchito” dijo Nacho Castro en el video que publicó en su Instagram dónde confiesa que cometió un delito.