El inoxidable “Flaco” Galván: campeón a los 48 años

A los 48 años, Adrián Galván volvió a sentir esa mágica e inigualable sensación de ser campeón jugando al fútbol que tanto ama. Se consagró con el Senior de Unión de Villa Krause al ganar la Copa de Campeones, en categoría Maxi, con los colores que tanto quiere, con su familia en la tribuna y anotando el gol que le dio el campeonato.

Para los futboleros es el “Flaco”, dueño de unas cualidades tremendas que lo llevaron a ganar torneos argentinos, y al que los años no le pesan cuando ingresa a un campo de juego donde destacó que encuentra su felicidad absoluta.

Pasó por varios clubes de San Juan y hasta lo hizo en Mendoza. Ganó mucho más de lo que perdió. Siempre siendo un laburante y no dando por perdida ninguna pelota, igual que ahora. Siempre la peleó, porque la vida lo llevó por ese camino. Y siempre se levantó con el fútbol como nexo para reencontrarse.

El “Flaco” es querido por todos. Bonachón. Todos lo pretenden en sus equipos. Pero se inclinó por Unión para disputar la Copa de Campeones Senior porque siente que fue el club con el que más se identificó y donde la gente más lo reconoció mientras fue futbolista profesional.

Se retiró hace seis años (a los 42) y todavía tiene la pasta de crack. Eso es innato y en la cancha lo explota. Juega donde lo pongan y siempre rinde. Y, además, no se achicó cuando tuvo que patear el penal que le dio el campeonato al superar en la final a Villa Ibáñez tras igualar sin goles en el tiempo reglamentario.

“Es una alegría muy grande. Obtener un campeonato con el Senior, con mi club, con mi familia en la tribuna, esto es una emoción muy grande”, contó Adrián mientras miraba a la tribuna en el estadio del Bicentenario buscando a los suyos.

Es que el “Flaco” y el fútbol van de la mano. Son inseparables. Como un estilo de vida. “El fútbol me sigue motivando, hace 6 años dejé de jugar -de manera profesional- y volver al vestuario, a vendarme, a entrenar, es una motivación muy grande para mí y los que me rodean”, admitió.

Vistió muchas camisetas, pero destacó que la de del Azul es especial. “La gente de Unión te lleva a meterle con todo, ellos son indispensables en el club”. Y es que en el equipo de Villa Krause el “Flaco” dejó su sello y sigue festejando: “El Senior es muy distinto a lo que he ganado en los Argentinos y torneos federales, pero es una emoción ganar a esta edad en la que somos todos amigos”.

Y es que el Senior permite eso. Reencontrase con excompañeros y rivales, pero ya con otro tinte dentro de la cancha, más allá que meten y todos quieren ganar porque nunca dejaron de ser futbolistas. “Este torneo te permite estar con jugadores que hacía mucho no los veía. Jugamos la final contra el “Luto” Molina, “Petinato” Núñez y “Chaca” Ibaceta con los que he jugado y ganado campeonatos. Por eso es una alegría grande verlos en la cancha y terminar todos abrazados más allá del resultado”, resaltó Galván.

A los 48 años y todavía con mucha para darle a la redonda, tiene esa capacidad de sobresalir en cualquier sector. “Juego donde me pongan, trato de rendir lo mejor que puedo y dejar todo hasta que las piernas digan basta”. Porque el “Flaco” tiene en las tribunas a sus hijos, que también son futbolistas y les enseña con el ejemplo: “Quiero que se guíen por lo que saben y no por el apellido. Que aprendan a ser honestos y hacerlo con seriedad”.

A ellos les dedicó el campeonato y buscó en el festejo del penal decisivo, porque adentro de la cancha sigue siendo un pibe con mucha explosión y solidaridad, aunque admite con un sonrisa que “en la semana siento los 6 años que hacen que dejé de jugar, pero le voy a seguir dando”

Es que para el “Flaco” el fútbol es su cable a tierra, su filosofía de vida y donde sabe expresar todas sus virtudes, tanto futboleras como personales. Un ganador que resalta que “el fútbol me dio felicidad. Me dio alegrías, muchos amigos y conocer gente increíble. Hoy siento lo mismo que cuando empecé a jugar en Primera porque soy feliz adentro de una cancha”.