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Sobreseyeron a cinco de los seis imputados por el crimen de Gastón Lima
Cuatro estaban detenidos, pero recuperaron la libertad con la nueva resolución de la Justicia. Solo quedó un sospechoso por la muerte del joven de 24 años.
Por Germán González
A seis meses del crimen de Gastón Mario Lima Ortega de 24 años, el joven asesinado de un piedrazo en Pocito. La Justicia sobreseyó este jueves a cinco de los imputados y solo dejó a uno como sospechoso de herir gravemente al chico, que falleció nueve días después de estar internado en terapia intensiva.
Los que recibieron la resolución judicial a favor fueron Kevin Alejandro Torrez, Gonzalo Martín Núñez, Jorge Luis Díaz Iñón y Alberto Ismael Blanes Zárate, que estaban acusados del homicidio agravado por ensañamiento, alevosía y el concurso premeditado por dos o más personas en perjuicio de Gastón Lima.
El fiscal de la causa, Adrián Riveros, pidió a la jueza de garantías Celia Maldonado que les dicte el sobreseimiento y la inmediata libertad, ya que las pruebas recolectadas hasta el momento no acreditaron que Torrez, Núñez, Díaz Iñón y Blanes produjeran la muerte del joven. Los testigos del caso no señalaron a ninguno de ellos como autores principales o necesarios de la grave lesión en la cabeza que recibió Lima ese 27 de marzo en la madrugada. Al chico le tiraron una piedra de forma contundente y cayó de la moto totalmente inconsciente.
El que quedó como único sospechoso de matar a Gastón Lima fue Matías David Iñón. El joven confesó su autoría, mientras que otros dos implicados lo señalaron como quién tiró la piedra durante la investigación: Torrez y Blanes.
El quinto y último sobreseído fue Gabriel Maldonado, un hombre que fue acusado de encubrir a Gonzalo Martín Núñez en una finca cuando era buscado por la Policía de San Juan. Al igual que a los otros cuatro, la Unidad Fiscal de Investigación (UFI) Delitos Especiales no encontró pruebas que demuestren que Maldonado haya actuado de tal forma para resguardar el paradero de su supuesto amigo.
La audiencia de este jueves estaba prevista para la 16.30 en la Sala 7 de Tribunales. Los que estuvieron presentes en el lugar fueron Núñez, Blanes y Maldonado. Este último asistió al acto procesal en libertad porque el delito que le achacaban era excarcelable. Mientras tanto Torrez y Díaz Iñón, primo del ahora único sospechoso, vivieron la audiencia por teleconferencia desde el Servicio Penitenciario Provincial.
El encuentro empezó tarde porque faltaba que uno de los imputados, Torrez, participara de la audiencia. Al parecer, solicitaron que sea traído ante la jueza, pero hubo un error en la comunicación y el hombre no estaba presente cuando estaba a punto de iniciar el debate. Por otra parte, el fiscal Adrián Riveros tardó en llegar a horario, pero dio aviso mediante sus colegas. El titular de Delitos Especiales estaba de turno y tenía que liderar la investigación del siniestro fatal que hubo en Santa Lucía, que se llevó la vida de un hombre de 30 años.
La madrugada del crimen Lima y su amigo Maximiliano Quiroga llegaron, cada uno en una moto, a una casa de Pocito donde estaban Matías Iñón y Gonzalo Martín Núñez. Los grupos de amigos discutieron y se agarraron a las trompadas. Lima quiso escapar en su moto, pero no arrancó y se subió con Quiroga y se fueron.
Para fiscalía, esa noche, hubo tres peleas entre los grupos de amigos. La segunda fue en la casa de Matías David Iñón, en Villa Huarpes. Iñón estaba en su casa con otras personas y Núñez salió en su bicicleta a vigilar si volvían Lima y Quiroga que prometieron venganza. Y así ocurrió. Núñez llegó perseguido por Lima y Quiroga. La víctima conducía la moto y su amigo iba como acompañante y llevaba un arma de fuego en su mano. Hubo disparos y piedras.
En el tercer altercado, recién entraron en escena Kevin Alejandro Torrez, Jorge Luis Díaz Iñón y Alberto Ismael Blanes Zárate. Torrez concurrió hasta la casa del presunto asesino en su moto, mientras que Blanes, en su auto Ford Focus acompañado por el primo de Iñón y una menor de edad. En principio fiscalía creyó como hipótesis que Iñón pidió a Blanes y Torrez perseguir a Lima y Quiroga en búsqueda de venganza, pero después eso fue descartado por los testigos, principalmente el de la menor, que en Cámara Gesell aseguró tanto Blanes como Iñón y su primo no planificaron la muerte de Lima ni hipotéticamente la de Quiroga.
Los grupos se encontraron nuevamente en Calle 5 y Laprida. Allí se bajó del auto Matías David Iñón y le tiró la piedra a Gastón Lima que terminaría por quitarle la vida nueve días después mientras agonizaba en la terapia intensiva del Hospital Privado. Este jueves Fiscalía expuso que solo quedó comprobado que Torrez le produjo lesiones a Maximiliano Quiroga (seguirá imputado por ese delito), mientras que sobre Blanes y Díaz Iñón explicó que nunca salieron del auto, según los relatos de los testigos del hecho.
Sobre Matías David Iñón quedará ahora saber que Fiscalía haga la acusación para ir a juicio y si mantendrá la misma imputación. Es que el homicidio agravado podría pasar a ser homicidio simple o legítima defensa, expresaron desde el entorno del acusado.
El crimen dividió al departamento de Pocito. Los familiares y amigos de la víctima y de los acusados salieron a la calle y marcharon para pedir Justicia. Mientras los de Lima pidieron condena, los otros gritaron por la libertad de los detenidos y que investiguen a Maximiliano Quiroga por intento de homicidio y portación ilegal de armas de fuego. El hecho paralizó al departamento del sur con cortes de calles e incendios de gomas.
Este jueves, en las afueras de Tribunales algunos de los familiares de los acusados esperaron la resolución con ansias. Después de mucho se enteraron de la noticia que mucho esperaban: la liberación de culpa y cargo del asesinato de sus seres queridos, y los vieron en libertad.