¿Vuelven los 90? La tropa menemista que Pichetto quiere arrimarle a Macri

El hombre es dueño de sus silencios y esclavo de sus palabras, dice un viejo refrán que, en tiempos electorales y aplicado a la política argentina, cobra hoy más vigencia que nunca. Y si no que lo diga el Gobierno nacional que pasó, casi sin escalas, de culpar al peronismo de todos los males del país a encumbrar al peronista Miguel Ángel Pichetto como compañero de fórmula de Mauricio Macri, en un intento por mostrar apertura y ante el temor de perder su reelección en octubre.

Como sea, en materia discursiva algo tendrá que explicar el jefe de Gabinete Marcos Peña –declarado enemigo de la 'vieja política'- porque, al parecer, sea a instancias del propio Gobierno o del mismo Pichetto, la idea de sumar peronismo al oficialismo no se agota en el rionegrino, quien ya sueña con la incorporación de algunos de sus antiguos compañeros de ruta al armado de Juntos por el Cambio.

Para la próxima semana, incluso, se cocina un acto en Parque Norte para presentar a la corriente “Peronismo Republicano”, que apoya al senador del PJ e incluye a dirigentes del peronismo ortodoxo con los que el oficialismo buscaría restarle votos al PJ kirchnerista, por un lado, y al justicialismo que está encolumnado detrás de Roberto Lavagna, por el otro. Varios de esos dirigentes, hay que decir, supieron abrevar en aguas menemistas.

No por nada el propio Pichetto contó que al primero que llamó para comunicarle el ofrecimiento de Macri para que lo acompañe en la fórmula presidencial fue a Carlos Menem, quien enseguida le dio su bendición. "Felicitaciones doctor, Miguel Ángel Pichetto. Con su experiencia política, capacidad de diálogo y sentido patriótico contribuirá al engrandecimiento de nuestro país", escribió Menem en su cuenta Twitter.

Incluso, el nombre de la hija del ex presidente Zulemita Menem se barajó ayer como eventual precandidata a diputada en La Rioja por Juntos por el Cambio, en una reunión que mantuvieron Pichetto, el ministro del Interior Rogelio Frigerio y el riojano Jorge Yoma, actual embajador en Perú, ex senador del FpV, además portador de un apellido de fuertes lazos con el menemismo.

Sin embargo, la propia Zulemita salió hoy a desmentir vía Twitter que piense en incorporarse al armado oficialista: “No soy candidata a nada y no lo seré, amo mi provincia, voy a seguir ayudando desde el lugar que lo hice siempre, sin banderas políticas, desde el corazón que es algo que algunos políticos de nuestra provincia olvidaron”.

Amén del rechazo de Zulemita, la tropa que acompaña a Pichetto contiene a dirigentes del peronismo con dilatada actuación durante el gobierno de Menem.

Es el caso de Humberto Roggero, el ex diputado por Córdoba, que en 1997 fue elegido para presidir el bloque justicialista de la Cámara baja. También el de Miguel Ángel Toma que, antes de ser secretario de Inteligencia durante la presidencia de Eduardo Duhalde, se desempeñó como secretario de Seguridad Interior entre 1998 y 1999 en la gestión de Carlos Menem.

Otro nombre incluido en el armado pichettista es el de Ramón Puerta, actual embajador en España y amigo personal de Macri, además de dos veces gobernador de Misiones durante el menemismo.

El armado se completa con dirigentes del peronismo tradicional -varios identificados con el duhaldismo- como Daniel "Chicho" Basile, Juan Nemirovsky, Eduardo Camaño, Ángel Abasto y Juan Vitale, Gilberto Alegre y Daniel Navarro.

A todos ellos el kirchnerismo nunca los contuvo y tampoco lo hace el armado post K que lleva la fórmula Fernández-Fernández para la Presidencia. Y, aunque algunos de ellos se arrimaron en un principio a Roberto Lavagna, hoy parecen bien dispuestos a aportar al macrismo de la mano del rionegrino.

¿Estarían pensando en este armado los radicales cuando pidieron la ampliación de Cambiemos?

Por MICAELA PÉREZ