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Allanaron la casa del cura acusado de abusar de sus tres sobrinos
Los operativos policiales ordenados por el Segundo de Instrucción fueron realizados en la casa del sacerdote en Concepción. Los investigadores secuestraron material informático.
POR REDACCIÓN
En el marco de la investigación por tres denuncias de abuso contra el religioso Walter Bustos, el juez subrogante Ricardo Grossi, del Segundo de Instrucción, autorizó un allanamiento en la vivienda del sacerdote en Concepción, en la cual convive con sus padres.
En la casa del cura acusado de abusar de sus sobrinos, a raíz del allanamiento, los investigadores solo hallaron material informático, en el que buscarán algún indicio sobre los abusos.
Los padres del presbítero no se resistieron al procedimiento, según dijeron las fuentes.
Pero el principal objetivo del procedimiento no pudo ser cumplido. Pues buscaban el celular del cura, el cual no encontraron. Sin embargo, su abogado defensor lo entregó este miércoles por la mañana y dejó constancia de ello.
También, los peritos solicitaron al obispo Jorge Lozano, información de alguna pertenencia del vicario de Angaco en el Arzobispado para ser secuestrado y ponerlo a disposición de la investigación de la Justicia.
El lunes, el sacerdote Walter Bustos fue trasladado al Palacio de Tribunales para que preste indagatoria, pero se abstuvo de declarar. Sin embargo, su abogado defensor Juan Bautista Bueno anticipó que pedirá una ampliación de indagatoria porque el presbítero dará su versión de los hechos, una vez que conozca en profundidad las acusaciones.
El ex cuñado del religioso lo denunció el 29 de agosto a partir de que su hijo y sobrino del sacerdote, de 14 años, expresara que sufrió manoseos de parte de su tío cuando tenía 9.
Luego, sus hermanos más grandes, de 21 y 24, también lo acusaron del mismo padecimiento. En principio, trascendió que se trataría de una venga del hombre contra la familia Bustos a causa de su separación con la mamá de los chicos y hermana del cura. Sin embargo, ella expresó ante el juez que cree en los relatos de sus hijos. “La justicia va a hablar” ,dijo a un medio televisivo, cuando salía de Tribunales.
Por otra parte, un dato no menor, el juez Grossi terminó con su periodo como subrogante en el Segundo de Instrucción, ya que volvera el magistrado Pablo Flores, que fue suspendido por la Corte por 30 días como consecuencia de algunas irregularidades en el caso del ginecólogo Carlos Martínez, acusado de abuso sexual por más de una decena de mujeres.