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Acevedo y Grimalt, un partido cada uno, salvo si hay final
El entrenador argentino, José Luis Paéz, confirmó esta decisión. “Tengo plena confianza en los dos” destacó.
La constante rotación entre los jugadores de campo durante el partido es moneda constante para el seleccionador argentino. Es parte de su estrategia de juego. No sucede lo mismo con los arqueros “Conti” Acevedo y Valentín Grimalt. El que entra de titular juega todo el partido y el otro debe esperar 24 horas para ocupar ese sector en la pista del Aldo Cantoni.
Es que para José Luis Páez la rotación de los arqueros es parte de su táctica de juego y armado del equipo. En este mundial, el “Conti” debutó bajo los tres palos en el partido ante España (4-2), mientras que Valentín atajó el martes frente a Angola (4-0).
“La rotación de los arqueros siempre va a ser así. Desde que llegué que es así y yo tengo plena confianza en los dos”, argumentó Páez a DIARIO HUARPE sobre la decisión de alternarlos. Esa línea de un juego cada uno sólo podría romperse si Argentina llega a la final del Senior del próximo domingo, ya que en ese caso el propio entrenador elegirá. “Cuando llegue la final, ahí recién decidiré quién ataja, antes van a ir uno partido cada uno”, agregó el “Negro”.
Por ende y siguiendo el planteo del coach, esta noche en el encuentro ante Mozambique (a las 22) que marcará el cierre de la etapa de grupos, el arco estará cuidado por el sanjuanino Acevedo, quien se desempeña en el Barcelos de Portugal.
Diferente al jueves, en el compromiso de cuartos de final lo tendrá al mendocino Grimalt (juega en el Lodi de Italia), y si el triunfo se da el “Conti” regresará al puesto para la semifinal del viernes. Y ante una hipotética final recién ahí Páez elegirá por primera y única vez en el mundial.
La decisión del entrenador se enmarca en el muy buen y parejo nivel de ambos, que lleva a que el equipo no se recienta y mantenga la misma solidez defensiva apoyada por el cualquiera de los dos. Sin embargo, Páez los mira, los analiza y si Argentina llega a la final, romperá su estrategia y definirá al dueño del arco albiceleste.