Provinciales > Entre el olvido y la soledad
La dura realidad de los ancianos en la residencia Eva Perón
A fin de año, la residencia Eva Perón realiza un balance, con aspectos positivos y negativos del año. En este caso, dos datos resaltaron: el abandono y el olvido de muchos ancianos que no son visitados por sus familias.
Por Sol Manzano
La residencia Eva Perón, ubicada en Rivadavia, es un hogar en el que habitan 168 adultos mayores. Tras un nuevo año de actividad, desde la institución se realizó un balance de la misma, destacando aspectos positivos y negativos. En este último caso, hay una realidad muy compleja que atraviesan los ancianos: la soledad y el abandono. Según su directora, Fernanda Vives, quien dialogó con DIARIO HUARPE, el compromiso de las familias es desigual y, en numerosos casos, los residentes terminan encontrando en el personal y sus propios compañeros una fuente de afecto y contención emocional, viéndolos como su nueva familia.
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“Hay personas que no tienen familiares y están aquí porque no tienen a nadie. Y hay otras cuyos familiares, lamentablemente, se olvidan de que el padre o el abuelo está acá”, señaló Vives, quien destacó que son menos los ancianos que reciben visitas regulares por parte de sus familias.
La residencia también atiende casos derivados de oficios judiciales, en los que los ancianos llegan tras situaciones de extrema vulnerabilidad. Actualmente, 56 personas se encuentran en lista de espera para ingresar, mientras el espacio disponible limita la capacidad de respuesta.
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Ante esta situación, se ha proyectado la creación de un centro de día dentro de las instalaciones. Este espacio permitirá que más personas puedan acceder a actividades recreativas, gimnasia y otros servicios durante cada jornada, sin necesidad de ocupar las áreas residenciales. “Esto aliviará la lista de espera y permitirá atender a más personas, aunque sea de manera parcial”, explicó Vives.
La otra cara, el balance positivo
Vives resaltó que este año también se han realizado tareas que son sumamente positivas para los adultos mayores. “Han tenido muchas actividades de sociabilización, que es lo fundamental para ellos. Desde un principio se planteó una residencia puertas abiertas y lo estamos logrando. Puertas abiertas para quienes quieran ir a compartir con ellos actividades. Hay un calendario de actividades para que no se superpongan, justamente, y para que los adultos mayores también salgan”, detalló.
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“Hemos ido a la Difunta Correa en dos oportunidades, con dos grupos distintos. Hemos hecho el cierre con el hogar Huarpes en Las Cavas de Zonda. Está previsto también un paseo al dique Punta Negra, pero bueno, estamos esperando un día que no haya tanto calor”.