Boca vs Huracán terminó con polémica: la policía custodió al árbitro

El clima en el estadio Tomás Adolfo Ducó se desbordó luego del empate 0-0 entre Huracán y Boca Juniors, cuando los pasillos del estadio se convirtieron en escenario de un violento incidente entre la dirigencia del Globo, su cuerpo técnico y algunos jugadores, y el árbitro del partido, Hernán Mastrángelo. El conflicto estalló después de una controversial jugada en el último minuto del encuentro, que involucró al VAR y terminó con el árbitro retirándose del lugar entre gritos e insultos.

El escándalo comenzó cuando, en el tiempo adicional, Mastrángelo sancionó un penal a favor de Huracán, que podría haber significado la victoria para el local. Sin embargo, tras revisar la jugada con el VAR, el árbitro dio marcha atrás en su decisión, anulando el penal y generando el enojo de los jugadores y la dirigencia de Huracán. Las repeticiones de la jugada no mostraban una infracción clara sobre Walter Mazzanti, lo que intensificó las críticas de los locales sobre la actuación del árbitro y la intervención del VAR.

El clima de tensión se trasladó rápidamente fuera del campo de juego, cuando varios dirigentes de Huracán, enfurecidos por la decisión, se dirigieron hacia la zona de vestuarios para confrontar a Mastrángelo. La situación escaló rápidamente, y los pasillos del estadio se convirtieron en un verdadero caos, con empujones, corridas y la intervención de la policía para intentar controlar el desorden. Incluso el entrenador de Huracán, Frank Kudelka, y algunos jugadores del equipo se involucraron en el enfrentamiento, intentando calmar la situación pero quedando atrapados en medio de los empujones.

La magnitud del escándalo fue tal que la Liga Profesional decidió que los jugadores de Boca no participaran de la zona mixta ni de las conferencias de prensa posteriores al partido. Los futbolistas del Xeneize abandonaron el estadio en silencio, con el único comentario público de Frank Fabra, quien se refirió a su vuelta a la titularidad sin entrar en polémicas. Mientras tanto, Mastrángelo fue blanco de fuertes insultos por parte de los hinchas de Huracán que seguían merodeando el estadio.

Una vez controlada la situación en los vestuarios, el entrenador de Huracán, Frank Darío Kudelka, no dudó en expresar su enojo hacia el uso del VAR y las decisiones arbitrales. A pesar de aclarar que no ponía en duda la honestidad de los árbitros, Kudelka cuestionó fuertemente la disparidad en las decisiones de los árbitros en distintos partidos. "Es raro el reglamento. Nos pasó como el otro día. Tanto (Germán) Delfino hoy como el VAR la vez pasada (ante Atlético Tucumán) manejan más que los árbitros que están adentro", dijo visiblemente molesto, al tiempo que insistió en que las decisiones sobre las jugadas no eran consistentes.

Este bochornoso episodio dejó una amarga sensación en Huracán, que no solo se vio perjudicado por la anulación del penal, sino también por la manera en que se gestionó la controversia fuera del campo de juego. Las tensiones persisten, y la polémica sobre el uso del VAR sigue siendo un tema candente en el fútbol argentino.