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Con un acto en su casa natal, conmemoraron los 134 años del fallecimiento de Domingo Faustino Sarmiento
Como todos los años, la cita se dio en la casa del Maestro de América.
POR REDACCIÓN
Este domingo 11 de septiembre se celebra el Día del Maestro, en honor al fallecimiento del Domingo Faustino Sarmiento. El acto estuvo encabezado por el vicegobernador de la provincia y contó con la presencia de sanjuaninos que llegaron hasta el lugar y algunos turistas que pasean por el Museo, donde pudieron disfrutar de algunas comidas típicas y la musicalización de la banda de música de la Policía de San Juan.
La ministra de Educación, Cecilia Trincado, fue la encargada de abrir el acto de celebración de los festejos por el Día del Maestro. "Hoy 11 de septiembre volvemos a honrar a Domingo Faustino Sarmiento, homenaje que se inició esta semana, recordando a sus padres y un Sarmiento niño, corriendo por las habitaciones de esta casa, con sus luces y sombras, forjando su personalidad y de espíritu inquieto", destacó la funcionaria.
En el ingreso al Museo Casa Natal de Sarmiento, funcionarios, docentes y publico en general rindieron homenaje al padre de la educación. "Debemos mirarlo desde una perspectiva más importante, viendo al hombre que evoluciono y fue un gran combatiente y logro una apuesta fuerte a la educación popular y la pasión por llevar adelante sus ideas", indicó Tricado.
En su discurso, la ministra de Educación de la provincia, hizo mención a uno de los libros escritos por el propio Sarmiento. "En su libro Educación Popular, el prócer hace referencia a dos principios básicos de la educación. Uno de ellos asegura que la educación es responsabilidad del estado y que esta debe ser independiente del poder político y de la religión. Entre sus hojas se resume la propuesta revolucionaria que Sarmiento tenía en ese momento".
Para Sarmiento, la educación debía ocupar un lugar clave. "El progreso ha creado instituciones desconocidas para el siglo pasado. La instrucción pública, cuyo objeto tiene la aplicación a las nuevas generaciones de la inteligencia individual y el hecho de la razón", explicó la ministra.
La funcionaria destacó que el libro del sanjuanino, se puede comprender que el poder, la riqueza y la fuerza de una Nación, dependen de la capacidad industrial, rural e intelectual de las personas que la componen. La educación pública no debe tener otro fin más que aumentar las fuerzas de producción, de acción y dirección, aumentando cada vez más el número de personas que posean estas capacidades.
Sarmiento mostraba un gran respeto por los maestros, ya que consideraba que eran el centro del proceso de enseñanza y aprendizaje, no solo por enseñar, sino por los valores que transmiten su sola presencia, agregó Trincado.
"La vivencia de los años de pandemia, nos hizo sentir la ausencia del encuentro docente- estudiante en las salas de clases y con ellos poner en valor la dimensión socioemocional en el aprendizaje de habilidades no cognitivas. Estas son el conjunto de conductas, actitudes y rasgos de la personalidad que ayudan al individuo a entender sus emociones, establecer metas positivas, a sentir empatía y resolver conflictos y la toma de decisiones importantes. Allí se puede ver la importancia del rol del maestro y las maestras en la formación", concluyó la ministra de Educación.