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Denuncian discriminación tras echar a 50 adolescentes judíos de un vuelo en España
50 adolescentes judíos fueron desembarcados de un avión en Valencia. La empresa alega “comportamiento disruptivo” y niega motivos religiosos.
POR REDACCIÓN
El gobierno de Francia intervino en un incidente ocurrido en un vuelo comercial de la aerolínea Vueling, en el que unos cincuenta adolescentes franceses judíos fueron obligados a bajar del avión en el aeropuerto de Valencia, España. El grupo regresaba de unas vacaciones organizadas por el Club Kineret y tenía destino final en París-Orly.
El ministro de Relaciones Exteriores francés, Jean-Noel Barrot, se comunicó con la presidenta de la aerolínea, Carolina Martinoli, para expresar su preocupación por lo sucedido y solicitar explicaciones formales. Según un comunicado oficial, el funcionario transmitió “la profunda conmoción” generada por el episodio y consultó si el grupo fue discriminado por motivos religiosos.
La compañía aérea sostuvo en su defensa que los adolescentes manifestaron un “comportamiento inapropiado” y una “actitud de confrontación” que comprometía la seguridad del vuelo. En dos comunicados, Vueling indicó que se manipularon equipos de seguridad y que, a pesar de las advertencias de la tripulación, la conducta no se modificó. Por ese motivo, el piloto solicitó la intervención de la Guardia Civil.
Durante el desembarco, la coordinadora del grupo fue retenida momentáneamente, y la situación quedó registrada en video. La empresa inició una investigación interna y aseguró que compartirá sus resultados con las autoridades de Francia y España.
Por su parte, la organización Club Kineret anunció que presentará una denuncia contra la aerolínea por “violencia física, psicológica y discriminación por motivos religiosos”. Su abogada, Julie Jacob, declaró que no hubo incidentes previos ni amenazas por parte de los menores.
El caso generó reacciones internacionales. El ministro israelí de Asuntos de la Diáspora y Lucha contra el Antisemitismo, Amichai Chikli, aseguró que el grupo fue desembarcado por cantar canciones en hebreo. Esta versión fue desmentida por la Guardia Civil, que afirmó no haber identificado la confesión religiosa de los involucrados.
En tanto, algunos padres señalaron que uno de los jóvenes fue reprendido por cantar en hebreo, pero negaron cualquier conducta inapropiada del grupo. La asociación organizadora calificó el hecho como una “escena de brutalidad inusual y claramente sesgada”.
Mientras tanto, la Cancillería francesa también solicitó información al embajador de España en Francia. El episodio permanece bajo investigación y se aguarda el resultado del proceso interno iniciado por la aerolínea.