Depresión, un flagelo que se agrava en San Juan por la saturación del sistema de salud

Este lunes 13 de enero se conmemora el Día de la lucha contra la Depresión. En San Juan, se rompió con el tabú de no hablar sobre la salud mental, por lo que, cada vez más son más los sanjuaninos que le dan prioridad y se animan a recurrir a la atención de profesionales. El psicólogo Alberto Mentesana dialogó con DIARIO HUARPE y explicó la situación que se vive en la provincia. Detalló cuáles son los síntomas más recurrentes y los beneficios de la medicación, como así también se refirió a la saturación que hay tanto en el sistema público como en el privado en la atención de pacientes.

El profesional dijo que “no es que hay más casos de depresión, sino que antes era un tema tabú y no se hablaba. Los medios han ayudado a profundizar sobre la importancia de la salud mental”. A su vez, explicó que la depresión es un trastorno mental grave, que debe ser tratado por un psiquiatra. En el peor de los casos, un cuadro puede llevar a que la persona se quite la vida.

Con respecto a la situación de San Juan, el profesional destacó que hay mucha demanda y que el sistema de salud, tanto público como privado, está saturado. “La mayoría de los turnos ya están dados y está todo colapsado. En la parte privada hay que tener en cuenta que las personas pagan por su servicio, pero aun así, hasta recibiendo obra social, no damos abasto”, señaló.

“Mucho tiene que ver con que hoy en día se está hablando de la salud mental. La gente toma conciencia y acude más a los psicólogos. Algunos acceden a otros tipos de ciencias como el reiki y demás, pero nosotros nos centramos en lo científico y destacamos que es necesaria la atención de un especialista matriculado. Cabe mencionar que es necesaria la medicación que solo puede ser recetada por psiquiatras”, especificó.

Síntomas

“La depresión afecta a la persona en su energía, en el sueño, la inhibe en su parte psicomotriz, es decir, queda más lenta o le cuesta realizar diversas tareas. Además, este flagelo invade los sentimientos y pensamientos de culpa, ya que los damnificados creen que son responsables de todo, se sienten menos que los demás y hasta tienen pensamientos de quitarse la vida”, dijo Mentesana.

Según los datos a nivel mundial, Mentesana explicó que el 15% de las personas que sufre depresión tiene pensamientos suicidas y ha intentado,al menos una vez, terminar con su vida. “A nivel provincial no hay cifras exactas debido a que es un tema muy vidrioso, pero sí se sabe que hay números alarmantes”, expresó. Según los últimos datos a los que tuvo acceso este medio, en 2024, hasta principios del mes de octubre, hubo 66 personas que se quitaron la vida, aunque estos datos fueron en ascenso.

Picos de depresión por edades

Si bien no está especificado y encasillado, el profesional mencionó que en San Juan las edades en donde se “despierta” la depresión en las personas son: en la adolescencia, cerca de los 20 años; en los hombres a los 40 años y en las mujeres en los 30, aproximadamente. “La mujer, por lo general, tiene más tendencia a ser depresiva, según datos mundiales. Hay que aclarar que el factor genético influye mucho también en estos casos”, aclaró.

La depresión viene en la genética

Mentesana explicó que la depresión es un factor genético que se hereda, aunque no siempre sucede. “Por ejemplo, si en mi árbol familiar hay muchas personas depresivas, seguramente tenga una tendencia a la depresión, pero eso no quiere decir que me va a pasar sí o sí”, detalló.

“Si mis padres son depresivos, pero yo me crié en un entorno en donde siempre me cuidaron, tengo una vida activa y feliz, lo más probable es que no sea depresivo. Caso contrario es que yo tenga tendencia a la depresión y una vida en la que no me enseñaron sobre autoestima y no me cuiden. Ahí, probablemente, se me despierte la depresión”.

Dónde debo acudir

En caso de que uno mismo esté atravesando esta situación o conozca alguna persona que sufra depresión, es importante siempre acudir con un profesional. “Se debe tener una escucha activa sin juzgar. Podemos acompañar a quien tenga depresión e incentivarlo a que acuda a un profesional de la salud mental”, dijo.

“En caso de urgencias, se puede ir a los hospitales públicos. Además, se puede llamar al colegio de psicólogos, que tiene la matrícula de todos los profesionales matriculados de San Juan y especializados en esta patología para que se puedan tratar. Fuera de ello, una simple charla puede ayudar muchísimo a la persona que tiene depresión. Es un gran problema cuando no se habla y no se ofrece la ayuda necesaria”, concluyó.