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En qué van a trabajar los beneficiarios de planes sociales

El ministro de Desarrollo Social, Daniel Arroyo, confirmó hoy que avanzarán con una modificación en el esquema de estos planes. En tanto, aclaró que no será obligatorio para los beneficiarios.

POR EL CRONISTA PARA DIARIO HUARPE

El ministro de Desarrollo Social, Daniel Arroyo, confirmó hoy que el Gobierno avanzará con una modificación en el esquema de planes sociales para que sus beneficiarios den una contraprestación en al menos cinco rubros distintos. Pero aclaró que no será obligatorio, por lo que percibirán un pago extra mensual que representará el valor de un salario mínimo, vital y móvil.

"El objetivo más claro es que las personas vayan pasando del plan social al trabajo", dijo el funcionario al explicar la iniciativa que será anunciada a fines de febrero, con la idea de que se aplique todo el año en todo el país. 

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La prueba piloto de la iniciativa es el programa "Pintando Escuelas", por el que los beneficiarios están arreglando actualmente las instituciones educativas públicas sobre la base de convenios firmados por la Nación y los gobiernos provinciales. 

Preparan cambios para los planes sociales: sus beneficiarios tendrán que trabajar

Esos trabajadores primero son capacitados por el gremio Unión Obrera de la Construcción (UOCRA) y luego trabajan durante todo febrero en las escuelas; una vez que se certifica la obra, perciben un ingreso similar al salario mínimo de $ 16.875. 

Fuentes oficiales explicaron a agencias de noticias que hay entre 350.000 y 400.000 personas que están en condiciones de sumarse a la iniciativa para mejorar sus ingresos y además mejorar su capacitación para luego buscar trabajo en el sector privado.

Todas las capacitaciones que se realicen en el marco de este programa serán certificadas, con la idea de que los beneficiarios tengan un comprobante para en el futuro presentarlo ante un demandante privado de mano de obra. 

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La prueba piloto de la iniciativa es el programa "Pintando Escuelas", por el que los beneficiarios están arreglando actualmente las instituciones educativas públicas sobre la base de convenios firmados por la Nación y los gobiernos provinciales. 

Desde la cartera de Desarrollo Social explicaron que "no será obligatorio ni una condición excluyente para los beneficiarios realizar una tarea laboral para que continúen percibiendo el plan social" y aclararon que "no es una contraprestación por recibir un plan".

En el Gobierno explican que este programa es como un "puente" para que los beneficiarios de planes sociales se vayan preparando para empleos privados a medida que la economía se recupera y crece, generando oportunidades laborales. 

En qué van a trabajar los beneficiarios de planes sociales

"La idea es poder extender el programa a cinco rubros: la construcción, para veredas, vivienda, cordón cuneta, infraestructura básica; la producción de alimentos; la industria textil; la economía del cuidado (principalmente mujeres que cuidan de otras personas); y el reciclado", puntualizó Arroyo esta mañana en diálogo con radio El Destape. 

En esa línea, al ser consultado sobre si el pago extra al trabajador correrá a cuenta del Estado o de la empresa privada que lo empleé, Arroyo explicó: "Dependerá da la circunstancia y del rubro. Quién lo contrate completará el ingreso y pone lo que son los insumos y las herramientas para poder trabajar".

Al finalizar, el ministro detalló que no cree que esta iniciativa sea criticada "porque lo que hay es un vínculo con el trabajo,  la capacitación y el acompañamiento, que aunque la economía vuele hay gente que necesitan un sistema de tutoría y acompañamiento para insertarse en el mundo laboral".

Sector de la construcción

Macri en campaña había presentado un proyecto similar

Durante la campaña de 2019, el ex presidente Mauricio Macri  ya había anunciado la presentación de un proyecto para reconvertir planes sociales en empleo formal.

Se trataba del plan de "empalme", que buscaba  también reconvertir cientos de miles de planes sociales en empleo genuino. "Se terminó el país de la ventajita, de los comportamientos mafiosos", había señalado Macri en su momento.

Según el plan que había ideado el gobierno de Macri, los $ 4000 que cobraba cada beneficiario serían descontados del salario de quien fuera contratado por una empresa privada, en rubros como construcción, textiles y empleos rurales.

En tanto, pensaban extender  los planes de "capacitación continua" para empleados públicos, para que "así tengan mejores herramientas de trabajo".

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