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En San Juan hay más de 2.000 chicos en espera para ser bautizados y unas 100 parejas para casarse

El dato fue confirmado por monseñor Jorge Lozano. 

19 de junio de 2020

El arzobispo de San Juan de Cuyo, monseñor Jorge Lozano, confirmó que en San Juan hay más de 2.000 familias católicas que están esperando para poder bautizar a sus hijos. Esta demora para que los niños accedan al sacramento católico se debe a la cuarentena dispuesta por el Gobierno para prevenir posibles contagios de coronavirus. 

En entrevista con DIARIO HUARPE, el religioso explicó que hay un promedio de 15 bautismos al mes en cada uno de los 46 templos que hay en San Juan. Es decir, que en un mes promedio se pueden realizar unos 690 bautismos. Si se tiene en cuenta que hace 3 meses que no hay actividad religiosa a causa de la cuarentena, el total de chicos sin recibir el sacramento ronda los 2.070 aproximadamente. 

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A esto se suman las parejas que esperan casarse. Sobre este número el religioso explicó que calculan que se trata de más de 100, de acuerdo a las consultas que reciben en las iglesias. 

Lozano comentó que mantiene reuniones casi semanalmente en el ámbito del Ministerio de Gobierno para avanzar de modo escalonado en las diversas dimensiones. "Entiendo que casamientos y bautismos podremos celebrarlos en pocas semanas, y para ello hemos preparado adaptaciones en los ritos para enmarcarlos dentro de los criterios del protocolo establecido", explicó.

En tanto que advirtió que es incierta la fecha para la realización de primeras comuniones y confirmaciones.

En cuanto al resto de las actividades que realiza la Iglesia Católica en San Juan, Lozano explicó que no pueden dar clases de catequesis, reuniones de grupos de diversas edades o encuentros en las comunidades.

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"Alguna de estas actividades se realizan de manera virtual, pero lo presencial es irreemplazable. También se ha limitado la tarea misionera casa por casa. La atención a los enfermos graves ha continuado, no así la visita a los ancianos y enfermos habituales en los hogares", aseguró el monseñor.

Con relación a la asistencia a las personas de escasos recursos, esto también se vio afectado porque en los espacios comunitarios se entregan alimentos y ropa, pero no están habilitados aún para los talleres de capacitación laboral o grupos de contención afectiva.

Otra de las limitaciones con las que trabajan todos los templos de los diferentes credos es que el Comité Covid-19 sólo permite un máximo de 20 personas en cada celebración sin importar la capacidad del edificio.

Sobre este tema, Lozano reconoció que la "cantidad de 20 personas es exigua, pero es un primer paso". Igualmente, el religioso aseguró que en la Argentina hay otras jurisdicciones que aún no tienen habilitación para celebraciones comunitarias, y otras que lo limitan a 10 personas.

"Desde la Iglesia Católica y otras confesiones religiosas hemos solicitado que la cantidad permitida de fieles sea proporcional al lugar. Nosotros propusimos que puedan participar hasta un tercio de la capacidad del templo. En esto seguimos trabajando", concluyó el obispo. 

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