Epilepsia, una enfermedad cada vez más común en niños y adultos mayores

Cada 26 de marzo, el mundo se tiñe de violeta para conmemorar el Día Internacional para la Concientización de la Epilepsia. En este sentido, Yésica Arbo, neuróloga en el Hospital Rawson dialogó con DIARIO HUARPE para explicar cuáles son los principales síntomas a tener en cuenta y en qué consiste el tratamiento.

La especialista detalló que la epilepsia es una enfermedad que predispone a tener crisis que pueden ser con alteración o sin alteración de la conciencia y van desde síntomas con movimiento en todo el cuerpo hasta ausencia, que sería una desconexión. Además, la médica destacó que la enfermedad es más frecuente en la infancia y en los adultos mayores, “pero eso no quiere decir que en el resto de las edad no pueden aparecer”, aseveró.  

 “Hay que hacer hincapié en que la epilepsia no solamente es con movimiento aunque socialmente sea conocida como convulsiones”.

En los niños, la epilepsia es multifactorial debido al neurodesarrollo, donde las conexiones y las redes neuronales se van desarrollando, explicó Arbo. En este contexto, se pueden formar redes neuronales anómalas que provocan este síntoma y por consiguiente la declaración de la enfermedad. En el caso de los adultos mayores explicó que también se trata sobre la disminución cerebral. 

"En los adultos mayores, la atrofia cerebral, que es la disminución del volumen cerebral con los años, puede causar crisis epilépticas al alterar la corteza cerebral, lo que genera una predisposición a padecer la enfermedad. Además, es importante descartar trastornos estructurales, como los antecedentes de accidentes cerebrovasculares, ya que pueden ser la causa de los síntomas”, señaló el especialista. “Descartamos que sea algo secundario a otra patología y luego determinamos que es una epilepsia idiopática”, agregó.

Esclerosis del hipocampo en rmn.

Las causas de la epilepsia pueden ser muy variadas, dijo la médica. "Existen muchas que son idiopáticas, lo que significa que no tienen una causa demostrable. También hay orígenes estructurales, que se refieren a un daño cerebral previo, así como causas de origen infeccioso o inmunológico. Es un abanico muy amplio, por eso, ante una crisis, es recomendable consultar con un neurólogo”.

“Los convulsiones no son sinónimo de crisis epilépticas. La convulsión es un tipo de crisis epiléptica donde hay movimiento tónico clónico en todo el cuerpo por alteración de la conciencia. El tema está ahí, en que la convulsión es lo que más asociado está socialmente a la epilepsia pero por ahí no tiene nada que ver porque a lo mejor el paciente tiene un trastorno sensitivo”, explicó la diferencia la neurológa.   

La epilepsia también puede ser hereditaria: “Hay un tipo de crisis que puede ser genética, donde distintos familiares (como padres e hijos) presentan el mismo tipo de crisis epiléptica, el mismo patrón electroencefalográfico y responden a la misma genética”. Para considerar que es una epilepsia de origen hereditario, deben cumplirse estos criterios.

Respecto al tratamiento, la epilepsia se maneja principalmente con medicamentos. “Existen muchos fármacos que deben ser elegidos cuidadosamente según las características del paciente, el tipo de crisis epiléptica que tiene y la accesibilidad”, explicó la neuróloga. “Hay fármacos que están contraindicados para mujeres en edad fértil, mientras que en los adultos mayores se debe tener un mayor control”. La médica destacó que “los fármacos representan el 80% de los tratamientos para la epilepsia”.