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Funeral del papa Francisco: ¿Cómo sigue el Vaticano hasta el inicio del cónclave?
Luego del histórico funeral en la Plaza de San Pedro, el Vaticano entra en un periodo de rituales y decisiones clave para elegir al nuevo sucesor de San Pedro.
POR REDACCIÓN
El funeral del papa Francisco se celebró este sábado en una emotiva ceremonia en la Plaza de San Pedro, seguida por el traslado de su féretro a la basílica de Santa María la Mayor, donde fue enterrado. Concluida esta primera etapa, el Vaticano inicia un periodo de rituales que culminará con el cónclave, la elección del nuevo pontífice.
Francisco falleció el lunes pasado a los 88 años tras sufrir un ictus, y su despedida movilizó a fieles y autoridades de todo el mundo. Tras su entierro, la Iglesia entra en una nueva fase marcada por la tradición, la organización interna y la toma de decisiones cruciales.
El primer paso es el periodo conocido como las Novendiales, que se extiende durante nueve días posteriores a la muerte del papa. Cada jornada incluye una misa en su honor, abiertas al público que desee rezar por su alma.
La primera misa fue el funeral celebrado el sábado. La última será el 4 de mayo a las 17 horas locales (15 GMT), en la Basílica de San Pedro, presidida por el cardenal Dominique Mamberti. Durante estos días, los cardenales se reúnen en congregaciones generales para intercambiar impresiones y definir la fecha del próximo cónclave.
Mientras dura este proceso, el cardenal Kevin Joseph Farrell actúa como camarlengo, responsable de la administración del Vaticano durante la Sede Vacante. Farrell fue el encargado de certificar oficialmente la muerte del pontífice, sellar sus aposentos y supervisar los preparativos del funeral.
Además, el camarlengo tiene un rol clave durante el cónclave: debe garantizar el aislamiento de la Capilla Sixtina, donde se realiza la votación, y asegurar que todo lo que ocurra dentro permanezca en absoluto secreto.
Una vez finalizado el periodo de luto, se podrá convocar formalmente el cónclave. Esto debe ocurrir en un plazo no mayor a los 20 días desde la muerte del papa, por lo que se espera que el proceso comience entre el 5 y el 10 de mayo.
La responsabilidad de coordinar esta etapa recae en el cardenal italiano Giovanni Battista Re, decano del colegio cardenalicio. Aunque no participará del cónclave por su edad (tiene 91 años), será quien convoque a los cardenales y ayude a definir la fecha del encierro. También podría jugar un papel decisivo en las alianzas previas, como ocurrió con el papa Francisco en 2013.
El cónclave, del latín "cum clave" (con llave), es el momento más solemne del proceso. Solo los cardenales menores de 80 años pueden votar y lo hacen en absoluto aislamiento dentro de la Capilla Sixtina.
La duración del cónclave varía según la rapidez con la que los cardenales alcancen un consenso. Cuando finalmente se elige al nuevo papa, la Iglesia lo anuncia con la tradicional fumata blanca, el humo blanco que se eleva desde la chimenea de la capilla, señal de que hay nuevo sucesor de San Pedro.
El mundo aguarda ahora con atención los próximos pasos del Vaticano, mientras se inicia el camino hacia una nueva etapa en la historia de la Iglesia Católica.