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Hijas de un excombatiente sanjuanino: cómo es vivir con un pedacito de historia malvinense en su casa
Por Emilia Junco
Este 2 de abril se conmemoró el Día del Veterano y de los Caídos en la Guerra de Malvinas y en el aniversario 39º de este hecho, DIARIO HUARPE dialogó con dos hijas de un excombatiente para conocer cómo es ser familiar y qué sentimientos tiene hacia él, quien es parte de la historia viva de Argentina.
“Orgullo es lo que sentimos por mi papá”, dijeron Priscila y Lisa Carrizo, dos de las cuatro hijas de Walter Carrizo, un pocitano que defendió las Islas Malvinas a bordo del crucero ARA General Belgrano.
El sanjuanino estuvo en el navío cuando fue atacado por los ingleses y es uno de los sobrevivientes del hundimiento de ese barco. Su hija Priscila, de 27 años, manifestó, con lágrimas en los ojos, que “hasta el día de hoy nos comparte su experiencia en la guerra, algo inolvidable para él e importante para nosotras que somos su familia”.
Su padre participó de la contienda desde abril hasta el 2 de mayo de 1982 cuando los británicos hundieron al Belgrano fuera del área de exclusión fijada por ellos mismos. Allí fallecieron 323 argentinos y sobrevivieron 770 combatientes, entre ellos Walter quien para ese entonces tenía 19 años.
“Mi papá perdió muchos amigos, pasó mucho frío hasta se lastimó en el mar. Fue muy valiente y era muy joven, así como muchos de los combatientes que fueron a Malvinas. Fue muy injusta esa guerra”, opinó Priscila sobre el conflicto bélico con Gran Bretaña por las islas australes.
Cada 2 de abril es un día particular para los Carrizo. La sanjuanina contó que siempre junto a sus hermanas le mandan mensajes a su padre para darle apoyo: “Nos juntamos toda la familia en esta fecha”.
Pasaron casi cuatro décadas del conflicto, y pese a tener viva la historia en casa, la joven consideró que el reconocimiento a estos héroes de la Patria todavía no es total.
“La gente los reconoce a los excombatientes por su lucha en Malvinas, pero considero que debería darles más reconocimiento y que se sepa mucho más de la historia, de lo que vivieron realmente cuando estuvieron defendiendo parte de nuestro territorio”, explicó.
Con menos de años compartidos, su otra hija Lisa, de 12, opinó que “si tienen un reconocimiento justo”. Es que la más joven de las Carrizo es la que más acompañó a su papá en distintas actividades, actos y cenas que tuvo el excombatiente.
La pequeña recordó el día que con su papá llevaron una bandera y la izaron juntos. “Fue muy emocionante. Me siento muy orgullosa por lo que hizo defendiendo la Patria”, concluyó.