Huarpe Deportivo
Las autoridades de Brasil suspendieron el partido frente a Argentina
Las autoridades sanitarias del país anfitrión determinaron que hay 4 jugadores que no debieron entrar al país.
POR REDACCIÓN
A pocos minutos de inicado el partido que Brasil y Argentina igualaban sin goles en el Arena Corinthians de San Pablo por las Eliminatorias Sudamericanas para el Mundial Qatar 2022, el evento fue suspendido tras la irrupción de funcionarios sanitarios del Gobierno brasileño, que denunció a cuatro futbolistas argentinos por violar la normativa federal de ingreso al país.
A cuatro minutos de iniciado el encuentro un delegado de la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria (Anvisa) ingresó a la cancha para notificar a los protagonistas que el partido no podía seguir por la disposición tomada este domingo, pasado el mediodía.
Específicamente la resolución sanitaria establecía que Emiliano Martínez, Cristian Romero, Giovani Lo Celso y Emiliano Buendía, los tres primeros titulares en el superclásico habían violado la reglamentación sanitaria vigente para prevenir posibles contagios de Covid-19.
En medio de la confusión por lo sucedido, el seleccionado "albiceleste" se retiró de inmediato al vestuario visitante del Arena Corinthians, lo que provocó la reacción de los 1.500 invitados al estadio, entre los que estaba el embajador argentino, Daniel Scioli.
"Hijos de puta", insultaron los hinchas brasileños en defensa de los jugadores argentinos, que ya habían comenzado a jugar cuando los notificaron de esta medida. Martínez, Romero, Lo Celso y Buendía fueron denunciados por el incumplimiento de la norma para el ingreso a suelo brasileño, prevista en la Ordenanza Interministerial No. 655, de 2021, que establece que los viajeros extranjeros que hayan pasado por Reino Unido, Sudáfrica, Irlanda del Norte e India en los últimos 14 días no pueden entrar a Brasil.
Anvisa comunicó que los cuatro involucrados debían ponerse en cuarentena y pidió su salida inmediata del país, lo que implicaba que ninguno de ellos pudiera jugar el partido de esta tarde. Sin embargo, los jugadores abandonaron la concentración en el Airport Marriott Hotel de San Pablo y abordaron el micro rumbo al Arena Corinthians, en una contradicción a lo decidido por los funcionarios nacionales.
La intervención de la FIFA y de la Conmebol fueron decisivas para destrabar el problema con los jugadores que militan en la Premier League inglesa, y a quienes se acusa de proporcionar información falsa al ingresar a Brasil.
Las autoridades sanitarias de ese país, luego de constatar esa infracción, comunicaron el hecho a la Policía Federal para que se tomen de inmediato medidas en el ámbito correspondiente.
Es que los jugadores argentinos aseguraron que no pasaron por ninguno de los 4 países vedados en las últimas 4 semanas, luego esto fue desmentido por los funcionarios brasileños cuando revisaron los viajes asentados en sus pasaportes.
Es verdad que Martínez, Lo Celso, Romero y Buendía viven Reino Unido, pero hace unos días abandonaron ese país y fueron a Venezuela para desde allí emprender el viaje a Brasil. En un comunicado oficial, la agencia sanitaria aseguró que los futbolistas del Aston Villa y Tottenham Hotspur incurrieron en "un notorio incumplimiento de la Ordenanza Interministerial y las normas brasileñas de control de la inmigración".
"Anvisa considera que la situación es un grave riesgo para la salud, por lo que aconsejó a las autoridades sanitarias locales que determinen la cuarentena inmediata de los jugadores, quienes no pueden participar en ninguna actividad y deben ser impedidos de permanecer en territorio brasileño, de conformidad con el art. 11, de la Ley Federal No. 6437/77", establece el comunicado emitido por este organismo nacional del Brasil.
Negociaciones previas
La polémica por el ingreso de estos jugadores comenzó el sábado cuando Anvisa inició una investigación sobre las condiciones de ingreso al país. Luego hubo una reunión de más de tres horas que las autoridades de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) mantuvieron con dirigentes de la Conmebol y funcionarios del Estado de San Pablo.
En un primer momento se acordó que los jugadores cuestionados también estaban incluidos dentro del modelo de burbuja sanitaria de Conmebol que ya fue aprobado por Brasil para todas las competiciones internacionales. Sin embargo luego Anvisa desconoció este acuerdo y acusó a los futbolistas de haber entrado al país violando la normativa vigente.