Policiales
Llamó a los bomberos por un incendio y terminó detenida por un arma de fuego ilegal
Se trata de un revolver marca Orbea calibre 32. Dada la edad de la mujer, recibió el beneficio de prisión domiciliaria.
POR REDACCIÓN
Una dotación de bomberos que acudió a un incendio alertados por el 911 se llevó una sorpresa cuando, extinguiendo el fuego, se encontraron con un arma de fuego sin papeles y cuya dueña terminó en manos de Flagrancia.
El hecho ocurrió cerca de las 11.10 de este lunes, cuando la dueña de una casa sobre calle Falucho en la Villa América, Capital, descuidó una vela encendida. Esta aparentemente perdió el equilibrio mientras se consumía y cayó sobre un colchón.
Casi de inmediato, el colchón comenzó a arder y cubrir la habitación donde se encontraba el mueble con humo y llamas. Esto alertó a su dueña que fue a ver que sucedía en la pieza y al ver el humo y el fuego huyó hacia la calle para pedir auxilio. Un vecino, que vio el incendio y escuchó los pedidos de auxilio, la socorrió con un matafuego y lograron extinguir un poco las llamas.
Tras un llamado al 911, una dotación de bomberos llegó hasta el lugar y comenzó a extinguir las pocas llamas que quedaban y que no lograron cubrir la totalidad de la habitación y la casa.
Sin embargo, mientras buscaban por ascuas y focos que pudieran desencadenar un nuevo incendio, personal de la dotación se encontró con algo inesperado: entre los restos de ceniza y carbón, encontraron un arma de fuego calibre 32 marca Orbea y tres cartuchos sin disparar, junto a una funda de cuero.
Inmediatamente dieron aviso a la Policía y personal de la Comisaría 2º llegó hasta el lugar. Al entrevistar a la dueña de casa y, aparentemente, del arma, dijo que era de su pertenencia y que los papeles de la misma se habían quemado junto con el fuego.
Por esta razón, la Policía dio aviso a Flagrancia y quedo detenida bajo los cargos de tenencia ilegitima de arma de fuego sin autorización. Dada la edad de la mujer, que no trascendió, recibió el beneficio de la prisión domiciliaria mientras la justicia aguarda por el informe de la ANMAC (Agencia Nacional de Materiales Controlados) sobre el origen y dueño original del revolver.