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Departamentales > Crisis hídrica

Los niveles de las aguas subterráneas están bajando y hay preocupación en Iglesia

Los primeros en alertar la situación fueron los de la Unión Vecinal de Rodeo, que tienen a cargo la distribución del agua potable. Las bombas sumergibles están largando menos caudal y ya saben que es porque las napas freáticas están bajando.

POR REDACCIÓN

05 de noviembre de 2019

La preocupación es generalizada en el departamento iglesiano. 
Es que el agua subterránea ha bajado considerablemente su nivel y temen un colapso generalizado en los sistemas de bombeos de agua que utilizan el sector de la producción y la Uniones vecinales para el suministro de agua potable.

“Hace unos meses empezamos a notar que los caudales de agua que tiraban las bombas no eran los mismos”, contó a DIARIO HUARPE Oscar Varela, presidente de la Unión Vecinal de Rodeo. “Primero pensamos en positivo y dijimos son las bombas. Pero los técnicos ya nos confirmaron que nos son las bombas, son las napas que han bajado”.

Sin nieve 

A la hora de las evaluaciones, todos asocian la disminución de los niveles con la falta de nieve en cordillera. Y esta no es una problemática que se soluciona cambiando una bomba.

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“El tema es más jodido", dijo Varela. "Porque vamos a tener que perforar más metros para  no quedarnos con las bombas colgadas”.

La misma problemática la tienen los productores que también dependen de este sistema para regar los cultivos y/o darle de beber a los animales.

“En nuestra finca el nivel ha bajado más de 8 metros”, dijo uno de los productores de Iglesia “Y esto es todo un problema, porque encima de los altos costos de electricidad que estamos pagando por bomba, para perforar hay que poner mucho dinero, que hoy no tenemos”.

En el caso de la vecinal de Rodeo, este último mes, pagó por el costo eléctrico de una de las perforaciones (la de la bomba sumergible más grande), 94 mil pesos y un total de alrededor de 150 mil pesos por todo el sistema.

"El cuadro de la situación financiera ya es difícil" manifestó Varela, "y ahora si tenemos que contemplar los costos de perforar más o hacer otro pozo, la cosa se vuelve cuesta arriba”, sentenció.  

De no mejorar la realidad, todos los que dependen de las napas freáticas para abastecerse de agua, van a tener que perforar más. Lo que significa una erogación extra, no contemplada y que ronda los 6.000 pesos, como mínimo, por metro de perforación.

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