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Neil Gaiman enfrenta nuevas acusaciones de abuso sexual
El autor de Coraline y American Gods enfrenta múltiples denuncias de abuso sexual, algunas de las cuales datan de décadas atrás.
POR REDACCIÓN
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Si sos víctima de violencia de género podés comunicarte a la Dirección de la Mujer al 4222713; al 0800 666 6351; a la Comisaría de la Mujer al 4281589; al 144 para pedir asesoramiento o al 911 si es un hecho urgente.
El autor Neil Gaiman, conocido por sus icónicas obras como The Sandman, Good Omens, American Gods y Coraline, se encuentra actualmente en el centro de una serie de acusaciones de abuso sexual. Según una investigación publicada por Vulture, el escritor enfrenta ahora cuatro nuevas denuncias, sumándose a otras anteriormente conocidas, que involucran a mujeres de diversas edades, muchas de ellas admiradoras suyas o colaboradoras en su trabajo.
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Las denuncias abarcan diferentes incidentes ocurridos en el transcurso de varios años, cuando Gaiman tenía entre 40 y 50 años, mientras que las víctimas, en su mayoría, eran mujeres de entre 20 y 30 años. Una de las acusaciones más antiguas proviene de 1986, cuando una mujer relató que Gaiman la besó a la fuerza, mientras él se encontraba en sus 20 años.
Entre las nuevas víctimas se encuentra Scarlett Pavlovich, quien relató haber sido violada por Gaiman en su casa en Waiheke, Nueva Zelanda. En su testimonio, Pavlovich explicó que fue invitada por la ex esposa de Gaiman para cuidar a sus hijos. Sin embargo, durante un tiempo en el que los niños estaban en una cita de juego, el escritor la acorraló, provocando una situación de abuso sexual. Pavlovich afirmó que, tras intentar rechazar las propuestas de Gaiman, fue sometida a acciones sexuales no consentidas.
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Otra mujer, Katherine Kendall, también acusó a Gaiman de un abuso emocional y físico. Kendall, quien había comenzado una relación con el autor en 2012, describió cómo, después de una serie de intercambios coquetos, Gaiman la empujó hacia la parte trasera de un autobús y le exigió que lo besara, lo que la dejó en un estado de pánico. Años después, Gaiman le habría ofrecido 60 mil dólares para costear su terapia, en lo que muchos interpretan como un intento de "compensación" por los daños causados.
Kendra Stout y Brenda, otras dos mujeres que se han sumado a las acusaciones, compartieron experiencias similares de abuso físico y emocional, con relatos de Gaiman ejerciendo control sobre sus cuerpos y deseos, incluso cuando las víctimas expresaban su incomodidad o rechazo.
Estas acusaciones ponen a Gaiman, quien hasta ahora ha gozado de una exitosa carrera literaria y de múltiples adaptaciones de sus obras, en una situación extremadamente delicada. A medida que surgen más testimonios, el futuro del autor en el mundo literario y su legado podrían verse empañados por estas gravísimas denuncias.