Provinciales > Historias sanjuaninas
Nico y Oriana, dos niños que pasan sus días aislados y extrañando a sus abuelos
Los chicos viven en el barrio Justo P. Castro III, uno de los lugares en donde comenzó el primer brote de coronavirus en la provincia.
Por Daniela Jácamo
"Abuelos los extraño, los amo", con estas cinco palabras escritas en una cartulina el pequeño Nicolás Sánchez, de 4 años, expresó cómo se siente en medio de la cuarentena estricta que lo aleja de sus amados "tatas".
Nico vive junto a sus padres Romina Zalazar (30) y Gastón Sánchez (32) y su hermanita Oriana de 7 meses.
Los Sánchez Salazar habitan en una de las viviendas del barrio Justo P. Castro III, uno de los conjuntos habitacionales en donde surgieron los primeros casos del brote de coronavirus que hubo en Caucete y que generó alarma a nivel provincial.
Romina, la mamá de Nico, contó que cuando el barrio fue aislado no les permitían salir y que sólo pueden llegar hasta el ingreso a retirar alguna cosa. También aclaró que las autoridades sanitarias y de seguridad se han encargado de abastecerlos con todo lo necesario. "Estamos bien, no necesitamos nada", aseguró la caucetera.
La joven mamá contó que el miércoles pasado toda la familia participó de un aplauso masivo. "En el barrio salimos a las veredas y por las ventanas a aplaudir a los agentes sanitarios y a todos los profesionales que nos están ayudando en este momento tan difícil", relató.
Justamente tras este acto de agradecimiento, Nico decidió mandarles un mensaje a sus abuelos. "Mi niño me pidió que lo ayudara hacer un cartel y que le tomara una foto para que sus abuelos pudieran saber que los extraña", dijo la mamá.
Es que, según relató Romina, Nico comparte habitualmente largas tardes de domingo con juegos junto a sus abuelos paternos Alejandra y Sergio, y con su abuela materna Carmen.
"Él siente mucha añoranza por sus abuelos porque ellos están muy presentes en su vida, también viven en Caucete y los fines de semana pasan tardes enteras jugando", recordó la caucetera.
Romina contó que los cuidados que han realizado ellos son muy estricto debido a que su hija Oriana, de sólo 7 meses de edad, nació prematura y tuvo algunas complicaciones. Por eso han extremado los cuidados para evitar poner en riesgo a la beba. "No hemos salido prácticamente de casa", dijo.
Ante la pregunta de cómo pasa Nicolás y su hermana Oriana estos días de cuarentena, la joven madre que, hasta antes de la pandemia estudiaba para ser maestra de nivel inicial, manifestó que tienen un amplio patio donde el chico juega.
Además, Nico también dedica parte de su jornada hacer las guías que le mandan desde el pre jardín en donde había alcanzado a hacer sólo la fase de adaptación
A todo esto se suman las videollamadas constantes con los abuelos para tratar de verlos aunque sea a la distancia y poder preguntarles como están y contarles lo que hizo en cada día.
Romina agregó que durante estos días de aislamiento tan estricto en uno de los barrios en donde comenzó el brote de coronavirus, se han sentido muy apoyados y contenidos por las autoridades del Gobierno, aunque reconoció que hubo discriminación por parte de la gente.
"Cuando vimos que llegaba la Policía a cerrar el barrio, sentimos temor por lo que nos podía pasar, pero de a poco nos fuimos dando cuenta que había que colaborar y ahora en el grupo de vecinos del barrio estamos atentos de lo que pueda necesitar cada uno de nosotros". La mujer agregó que saben que algunos de los vecinos están enfermos y ruegan que se mejoren pronto.
"Por momento sentimos que estamos en medio de una película, nos parece increíble todo lo que ha pasado en tan pocos días y al ver a Nicolás nos damos cuenta de la necesidad de contenerlo y de ayudarlo en estos momentos. Le explicamos que todo va a pasar pero que tendrá que seguir cuidándose para estar bien él y todos los que ama", concluyó.