Cultura y Espectáculos > Había sufrido daños
Tras la restauración completa, la estatua de Sarmiento volvió a la Casa Natal
La emblemática estatua de Domingo Faustino Sarmiento regresó a su lugar original frente al Museo Casa Natal, tras un exhaustivo proceso de restauración.
La emblemática estatua de Domingo Faustino Sarmiento fue reubicada frente al Museo Casa Natal de Sarmiento y así regresó a su lugar original tras un minucioso proceso de restauración que duró tres semanas. Esta intervención se llevó a cabo en el taller del Ferrourbanístico, perteneciente a la Dirección de Infraestructura Cultural del Ministerio de Turismo, Cultura y Deporte. La escultura, que había sufrido un 70% de daño debido a la erosión del tiempo, las inclemencias climáticas y actos vandálicos, fue restaurada en su totalidad, logrando recuperar el 100% de su estructura.
Una restauración cuidadosa y dedicada
Libana Guzmán, directora de infraestructura turística, comentó sobre el trabajo realizado: “El artista Abel Martínez, hijo del restaurador original, Juan Carlos Martínez, llevó a cabo una restauración excepcional”. Guzmán destacó la importancia de mantener la integridad del trabajo original, explicando que se cubrieron los ojos de la estatua para preservar el detalle de la pintura original.
La decisión de trasladar la estatua más cerca del museo fue estratégica, buscando mejorar su seguridad y accesibilidad para el público. “En el pasado, tuvimos problemas con su custodia, especialmente cuando la Casa de Turismo estaba en refacción y no contábamos con vigilancia permanente”, añadió Guzmán. Para garantizar la seguridad de la escultura, la dirección de turismo ha establecido un sistema de vigilancia que incluye dos policías adicionales y cámaras de monitoreo.
Un esfuerzo colectivo
El equipo de restauración estuvo formado por siete personas del taller, quienes se encargan del mantenimiento de esculturas y espacios culturales. “Hacen un trabajo día a día impecable”, comentó Guzmán, aunque no pudo especificar el costo total de la restauración. Sin embargo, se sabe que el proceso incluyó reparaciones estructurales, un repintado con acrílicos y lacas especiales, y medidas de protección para evitar futuros daños.
La restauración también contempló la creación de una réplica exacta del libro que Sarmiento sostiene, preservando así la pieza original que había sufrido un considerable deterioro. De esta manera, la historia y la cultura sanjuanina se mantienen vivas y resguardadas.