Un DT de Brasil le fue infiel a su esposa con la nieta de una estrella del fútbol

La vida privada del entrenador portugués Artur Jorge se convirtió en el centro de atención en Brasil y en el mundo del fútbol luego de que se revelara una infidelidad que puso fin a su matrimonio de más de tres décadas. El exdirector técnico del Botafogo, actualmente al mando del Al Rayyan en Qatar, fue sorprendido por su esposa, María Marques, manteniendo una relación con Hanna Santos, exreportera del club carioca y nieta del ídolo Nilton Santos. La revelación ha desatado una verdadera tormenta mediática.

Todo salió a la luz tras un descuido telefónico en diciembre de 2024. Artur Jorge, que conversaba con su esposa desde Doha, olvidó colgar correctamente una llamada, lo que permitió que Marques escuchara parte de una conversación íntima entre el técnico y su nueva pareja. La confirmación de la infidelidad desató la ruptura inmediata del vínculo, que hasta ese momento se consideraba estable y reservado.

El triángulo amoroso que sacude al fútbol brasileño

La relación entre Artur Jorge y Hanna habría comenzado en noviembre, tras la histórica victoria de Botafogo en la Copa Libertadores. Según fuentes brasileñas, durante el viaje del equipo a Qatar para disputar la Copa Intercontinental, ambos no hicieron esfuerzos por esconder su romance: paseos por la ciudad, gestos cariñosos en público y fotos juntos evidenciaron el nuevo vínculo. Todo culminó en el vuelo de regreso a Brasil, donde fueron vistos besándose frente a otros pasajeros.

Tras la separación, María Marques se refugió en su tierra natal, Portugal, y compartió en redes sociales un mensaje introspectivo sobre el proceso de sanación. Sin mencionar directamente a su exesposo, reflexionó sobre el valor del cambio, la ligereza del alma y la importancia de reencontrarse consigo misma. Su publicación recibió un aluvión de mensajes de apoyo por parte de amigos y seguidores, que destacaron su fortaleza y dignidad.

Mientras tanto, Artur Jorge continúa su romance con Hanna Santos, quien dejó su cargo en Botafogo TV y ha viajado varias veces a Qatar para encontrarse con él. Si bien su relación se ha fortalecido, el quiebre familiar ha dejado secuelas: los hijos del entrenador han tomado distancia, y las fiestas de fin de año estuvieron marcadas por la ausencia de unidad. El escándalo, más allá de las cámaras, sigue dejando cicatrices.