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Policiales > En la ruta 40

Una imprudencia al volante por poco terminó en tragedia

Tres ocupantes de un vehículo particular salvaron su vida esta tarde en la ruta 40 luego de colisionar al parecer a alta velocidad en la zona del Villicum.

07 de noviembre de 2022
La camioneta quedó totalmente destruida en medio de la Ruta 40. Tuvieron que remolcarla para sacarla de esta arteria. Foto: DIARIO HUARPE.

A las 20.20 aproximadamente de este domingo, se produjo una fuerte colisión de una camioneta Jeep Compass que regresaba desde Jáchal con tres ocupantes, los cuales fueron trasladados en ambulancias al hospital Rawson.

Un familiar de la conductora de la camioneta brindó, llegó al lugar y brindó algunos datos de los ocupantes del rodado, manifestó que la conductora se llama Marta Casas, una docente de Geografía de aproximadamente 54 años, domiciliada en el barrio FUVA de Desamparados y viajaba con su hermana Fabiana y un amigo de ambas al que solo conoce como Daniel, todos trasladados al hospital Rawson.

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Este familiar, que sería tío de dos de las ocupantes de la Jeep indicó que regresaban del departamento Jáchal donde habían ido a ver a su madre, quien está enferma.

En el lugar trabajó personal de Comisaría 18ª de Albardón, desde donde indicaron que los ocupantes del rodado presentaban lesiones leves y estaban siendo revisados en el hospital.       

Según el testimonio de uno de los protagonistas del siniestro, el vehículo intentó pasar a un colectivo que circulaba en la misma dirección, en una zona donde está prohibido adelantarse.    

Un testigo clave  

Según el conductor del camión Nicolás Videla de 23 años quien se dirigía hacia Jáchal para luego ingresar a ruta 150 con dirección a la localidad de Nonogasta en La Rioja. El conductor del camión trasportaba un equipo generador de electricidad y caños para una perforación, ya que trabaja para la empresa Hidroblan S.A. de la provincia de Mendoza.

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El siniestro vial ocurrió en la Ruta 40, a unos 8 kilómetros al norte del autódromo el Villicum Videla contó a DIARIO HUARPE que él se dirigía al norte, cuando al salir de una pendiente vio que de frente se acercaba un colectivo de larga distancia y de atrás un vehículo particular.

El vehículo particular se cruzó de carril en una zona donde hay doble línea amarilla, es decir donde no está permitido adelantarse y decidió salirse de la cinta asfáltica hacia la banquina de su mano.

El vehículo que estaba superando al colectivo lo impactó en el costado y se fue contra el camión, chocando la rueda trasera de la unidad y luego el guardabarro de las ruedas traseras del semirremolque. Ahí vehículo empezó a dar giros sobre su eje, perdiendo parte del tren trasero y delantero.

Por poco no se metió abajo del semirremolque indicó el conductor del camión, cuyos daños quedaron reflejados porque le arrancó el guardabarros. Nicolás Videla de inmediato bajó del camión y fue a ver a los ocupantes de la camioneta, quienes aparentemente se encontraban en buen estado de salud, aunque muy shockeados por el tremendo impacto.

Los airbags del rodado de menor porte se activaron y eso habría sido determinante al momento de salvar la vida de todos los ocupantes del rodado.

Por otra parte, el colectivo al que colisionó la camioneta e intentó sobrepasar trasladaba a unos 20 pasajeros que pese al siniestro pudieron continuar viaje hasta la Terminal de Ómnibus de San Juan.

La Jeep, dejó autopartes que se desprendieron a lo largo de casi 150 metros, distancia que recorrió el rodado haciendo trompos hasta que detuvo su marcha, quedando a cientos de metros del camión y el colectivo con los que colisionó.

A unos 50 metros de la camioneta estaba parte del tren delantero sobre el costado sur oeste de la ruta, al igual que parte de la llanta trasera que también había quedado al costado de la vía.

Un hecho anecdótico es que en la Jeep viajaba un cachorro, el cual era reclamado desde el hospital por su dueña. El animal había sido encontrado por personal policial y devuelto a sus familiares.

El tránsito en la zona estuvo controlado por personal policial y de Gendarmería Nacional, pero pese a las balizas a lo largo de varios cientos de metros en la ruta y con absoluta oscuridad, los vehículos que circulaban a alta velocidad, incluso algunos tuvieron que ser reprendidos por las autoridades policiales.   

 

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