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Educación de adultos en San Juan: más de 14.000 alumnos buscan terminar sus estudios
Los alumnos de la educación para jóvenes y adultos que quieren terminar el secundario son más de 14.000. Mejorar sus condiciones de vida, uno de los principales motores.
POR REDACCIÓN
Comienza la semana de la educación de Jóvenes y Adultos. Del 7 al 9 de noviembre habrá diferentes actividades relacionadas con este sector.
DIARIO HUARPE quiso conocer cómo es la educación que involucra a jóvenes y adultos en San Juan. A quiénes abarca, cuántos son y por qué retoman la escuela. Gabriela Moreno, directora de educación jóvenes y adultos, explicó cómo funciona este sistema y las historias que hay detrás.
Una oportunidad de mejorar
Hay dos razones que motivan a los alumnos sanjuaninos: el económico y empezar una carrera. Gabriela cuenta que muchos necesitan del título secundario para recategorizarse en sus trabajos, cobrar el título o para empezar una carrera universitaria.
En la provincia hay 14.625 alumnos cursando esta educación con el fin de completar tanto ciclo primario como el secundario. El alumnado comienza con chicos de 16 años para terminar la primaria y de ahí continúa con adultos de 50 años o más. La mayoría tienen entre 18 y 25 años.
Para atender a los 14.625 alumnos, unos 1.617 docentes se encargan de acompañarlos el proceso.
Son trayectos educativos adaptados en los que se cursan materias como lengua, matemática, Ciencias Sociales y Ciencias Naturales (centrado en biología), Inglés y Tecnología de la Información (TIC). En tres años se completa un recorrido escolar de manera intensiva.
“Algunos creen que el plan FinEs es más rápido porque van solo dos días, pero en realidad es más intenso porque miran los mismos contenidos en menos tiempo”, comenta.
Deserción
Siendo “la última oportunidad” la deserción sigue siendo alta, en la mayoría de los casos es por lo económico. “Muchos de los que asisten a los programas son el sustento de sus familias, el tiempo que tienen para trabajar sumado al de la escuela se superpone y terminan priorizando el trabajo”, agrega Moreno.
Si bien la educación para adultos no dispone de dispositivos como el ALFA para la reinserción de los alumnos. El Progresar es para muchos el incentivo que los mantiene. Eso referido a lo económico, pero hay un motor más.
La autosuperación
“Cada egreso se vive con emoción. Porque es el resultado de años volviendo a la escuela, haciéndose un tiempo entre la casa y el trabajo. Cada egresado de la educación para jóvenes y adultos es una persona que tiene más oportunidades”, comenta Moreno.
Este martes se organizó la muestra de trabajos finales de los alumnos. El lunes tuvieron una misa para agradecer y el miércoles tendrá el cierre en el auditorio Eloy Camus.