Un pogo para seguir pidiendo justicia a 15 años de la tragedia de Cromañón

Las zapatillas colgando son el símbolo de una generación herida y que culturalmente debió aprender de la peor manera. Después del 30 de diciembre de 2004 nada fue igual, una bengala, hechos de corrupción que se fueron comprobando a lo largo del tiempo, 194 muertos y al menos 1432 heridos y un colectivo de familias que todavía reclama justicia, son el saldo que dejó.

En la noche de ayer, 30 de diciembre y a 15 años del hecho, el anfiteatro del Globito ubicado frente al centro cultural estación San Martín, fue el lugar donde se honró la memoria de los pibas y pibes que murieron en aquella tragedia, en el festival “Los invisibles de siempre”.

Que se hiciera en “El globito” no fue azar, que el estado brinde espacios aptos para todo el público y que garantice normas mínimas de seguridad es una de las secuelas visibles.

Respecto al recital fue una jornada variada musicalmente y la familia de la cultura del rock estuvo presente acompañando. Sonaron tangos, trovas, reggae y claro, el rock.

Abrieron el homenaje el grupo Sabbado Negro (grupo revelación de Rawson para la FNS), demostrando su versatilidad con grandes éxitos del tango. Ellos aprovecharon el espacio y reflexionaron sobre lo que la tragedia de Cromañón significo y renovaron el pedido de justica.

Fueron parte del line up Sabbado Negro, Marcela Muñoz, Sawabona, Viejo Transistor, Pulpa, Superfan, 33 de Mano, La Oeste y Ojos de Coyote. Bandas de una calidad que nuevamente confirman la calidad de músicos que hay en la provincia.

Así fue el festival “Los invisibles de siempre”, un espacio donde se honró desde la música y que trata de cerrar una herida abierta en la organización y el orden cultural de todo un país.

RESURGIR DE LAS CENIZAS

Facundo Lucero, integrante de Sabbado Negro

"Fue un hecho que nos marcó a todos y nos hizo tomar conciencia a los músicos y bandas sobre los lugares donde íbamos a tocar, que no es todo así nomás y que las ganas de tocar no son una garantía de seguridad para nadie. Empezaron a ser prioridad la seguridad de todos".

Marcela Muñoz, solista

"Lo que quedó es lo que se aprende de las tragedias, lo que podemos rescatar de esto es que nos tenemos que cuidar entre todos y tener conciencia porque todos queremos volver a casa. Además a nivel musical fue mucho más difícil seguir tocando porque se cerrearon muchos lugares, eso hizo que nos tuvieramos que arreglar de alguna manera y surgieran espacios autogestivos".
 

Carlos Herrera, seguidor de la banda Callejeros

"Después de Cromañón nos organizamos para pedir justicia por la Callejeros llegamos a juntar hasta 400 personas, cuando tocó Casi Justicia Social acá lo fuimos a ver.  Esa tragedia nos dolió y nos dejó una herida muy grande porque nosotros ibamos a donde tocaran asi que podríamos haber sido uno de nosotros. Lo único que espero es que no se repita".

Sergio García

"Fue un antes y un después, yo pude ver a Callejeros antes del accidente en un Cosquín,  pero después de esa noche nada fue igual. La única culpable fue la corrupción y nos dejó devastados a todos. Eso hizo que se limitara muchas bandas y culturalmente se notó".