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Así está la negociación de Argentina con el FMI, punto por punto
POR EL CRONISTA PARA DIARIO HUARPE
El ministro de Economía, Martín Guzmán, viaja esta noche con destino a Washington DC, Estados Unidos, para participar de la reunión anual del Fondo Monetario Internacional (FMI) pero también para llevar adelante una nueva ronda de discusiones técnicas por un nuevo programa de Facilidades Extendidas con el Fondo.
Si bien el presidente Alberto Fernández aseguró que el acuerdo está cerrado, restan definiciones técnicas, aunque hay una "base de entendimiento", según indicaron fuentes oficiales sobre el avance de la negociación que se da en medio de una investigación contra Kristalina Georgieva.
El directorio del FMI está analizando la continuidad de la economista búlgara, que cuenta con apoyo europeo, tras la acusación de haber alterado datos de un informe del Banco Mundial durante su gestión en el organismo.
En la última reunión técnica, que tuvo lugar en Venecia, el Gobierno y el FMI dieron por terminados tres puntos de la negociación: desarrollar el mercado de capitales doméstico, movilizar la recaudación fiscal y fortalecer la resiliencia externa de Argentina.
Pero allí también hubo un reconocimiento al problema de balanza de pagos, que está generado por el peso de la deuda con el FMI. En ese marco, los plazos que se negocian son claves, con un tiempo de gracia para poder crecer y repagar.
El Gobierno negocia pagar al FMI el resto de los u$s 45.000 millones a partir de 2026, después de cancelar u$s 3800 millones de capital entre septiembre y diciembre este año.
PLAZOS DE REPAGO
Los tiempos para el acuerdo hacen prever que llegará a principios de 2022. En ese marco, el Gobierno descuenta que pagará los casi u$s 1900 millones que vencen el 22 de diciembre. El acuerdo, aunque se alcance en diciembre después de las elecciones deberá pasar por el Congreso y el directorio del FMI.
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Para ese pago y unos u$s 300 millones en intereses se usarán de vuelta los derechos especiales de giro (DEG) que llegaron en agosto. Fueron u$s 4.344 millones y ya se canceló el primer pago de capital con esos fondos.
FONDOS FRESCOS
De todas formas, el acuerdo podría incluir "fondos frescos" para hacer frente a la debilidad de la balanza de pagos. Los DEG que se utilicen para pagar los vencimientos de capital de este año y evitar una cesación de pagos con el FMI podrían volver con el acuerdo, admiten en el Ejecutivo.
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SOBRECARGOS
El reclamo por las sobretasas que cobra el FMI en acuerdos extraordinarios como el de la Argentina está atada a la negociación para reducirlos dentro del G20, que también tendrá una reunión paralela esta semana en Washington en el marco del encuentro del FMI. Será preparatoria para la reunión prevista a fines de este mes en Roma, donde participarán los presidentes del G20, en el cierre de la presidencia pro tempore italiana.
El objetivo para la reunión de esta semana del G20 es que la baja de sobrecargos se mantenga en la agenda para que en la reunión de Roma formen parte del comunicado final. El texto debería instar al FMI a que convoque a una reunión formal de directorio para analizar la baja, antes de fin de año.
AJUSTE FISCAL Y REFORMAS
El Fondo monetario reclama en sus informes una serie de reformas que fomenten la inversión, una baja del déficit fiscal y la salida gradual del cepo, entre otros puntos. En el Gobierno aseguran que el acuerdo no gira sobre esos ejes, sino en la baja del déficit de cuenta corriente.
De todas formas aclaran que el horizonte de fiscal lo establece el país. Las definiciones de macroeconomía corren por cuenta del país. Guzmán presentó un Presupuesto 2022 que prevé una baja del déficit fiscal al 3% del PBI para 2022, lo que genera tensiones dentro del Frente de Todos.
El Presupuesto contempla además una baja de subsidios, como reclama el FMI, aunque en el Ejecutivo aclaran que estará dada principalmente por la baja de costos en el marco del Plan Gas. A eso se sumará la segmentación de tarifas para focalizar los subsidios en quienes tienen menos poder adquisitivo.
CEPO
En el Gobierno reconocen que la salida del cepo será lenta. Primero se deberán limpiar los fondos que quedaron atrapados en el carry trade y que presionan al tipo de cambio por la vía de los dólares financieros. Quedan u$s 7.500 millones de los fondos que buscan salir. La política en el mientras tanto seguirá siendo la administración cambiaria y comercial, con prioridad para los sectores productivos.
Después de la negociación con el FMI y el G20, Guzmán se trasladará el viernes a Nueva York para reunirse con fondos de inversión y buscar tranquilizar a los representantes de Wall Street pero también fondos para la economía real en medio de la necesidad de dólares genuinos para fortalecer el frente externo.