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Formas para tener un jardín libre de los rayos del Sol y disfrutar sin peligros
Es sabido que la exposición al Sol durante muchas horas afecta seriamente a las personas. Por eso, Yo Construyo brinda una serie de tips, utilizando diferentes materiales, para proteger tanto al jardín como a la familia.
POR REDACCIÓN
En el verano, la exposición al Sol durante muchas horas afecta tanto a las personas como a las plantas. Por este motivo, Yo Construyo brinda una serie de tips para construir, a través de diferentes materiales, toldos, velas, techos y pérgolas para cuidar el jardín. Esto, con el objetivo de salir a disfrutar del aire libre junto con familiares y amigos.
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Para no quedarse siempre adentro del hogar y tener varias opciones de salidas hacia el exterior, hay una serie de alternativas que, además de ser funcionales, aportarán decoración al jardín y espacios verdes de la casa para que también en las horas diurnas estos sitios ocupados para hacer actividades en el exterior.
Velas o lonas
Son opciones prácticas y económicas. Pueden ser triangulares o cuadradas. A esto se le suma que se fijan fácilmente a muros y postes, por lo que no se generan grandes gastos.
Una opción al momento de instalar la lona, es hacerlo de forma ligeramente inclinada en vez de completamente plana: de esta forma, se garantiza que el agua de lluvia caiga hacia un lado, evitando encharcamientos y filtraciones. Para lograr una instalación perfecta, decántate por velas elásticas que te permitirán un mejor tensado.
En una zona con clima seco como San Juan y con temperaturas altas, los ideales son los modelos transpirables que te proporcionen frescor.
Pérgolas
Las pérgolas son elementos muy útiles para generar sombras en superficies de gran tamaño como terrazas grandes, jardines o patios. Regalan sombra, frescor y aportan decoración. Si el sanjuanino elige una pérgola para la terraza o para el jardín, estará invirtiendo en una solución efectiva a largo plazo.
Hay pérgolas de diferentes tipos: metálicas, de acero, aluminio o las más atemporales de madera. Si se inclina por una de estas últimas, se asegura que cuente con tratamiento de autoclave que protege el material de hongos, termitas e insectos.
Este tipo de construcción se encuentra en el mercado por metro cuadrado, por lo que no es necesario tener grandes superficies para cubrir. También se pueden adquirir en piezas sueltas, aunque las adosadas son ideales para espacios más reducidos.
Mallas de sombreo
Las mallas de sombreo forman parte de una solución “low cost”. Es un tipo de tela que se utiliza para proporcionar sombra en áreas al aire libre. Está hecha de un material tejido que permite el paso del aire y la luz, pero bloquea los rayos del Sol y reduce la intensidad de la luz solar directa.
Son materiales muy versátiles, puesto que se pueden utilizar como solución de sombreo, sistema de ocultación para ganar intimidad o combinar con otros materiales para crear una pantalla total que proteja de los rayos solares.
Teniendo en cuenta cómo golpea el Sol a la superficie terrestre de San Juan, las mallas también son útiles para cuidar huertos y jardines. Son capaces de limitar exceso de luz y calor, y también disuaden a los pájaros e insectos.
Materiales naturales
Siempre existe la opción de utilizar materiales naturales como plantas para protegerse del Sol. Es una forma de aportar claridad y frescor al ambiente. Algunos de los más populares son el bambú, el cañizo o el brezo, ya que son muy decorativos, no necesitan mantenimiento y se integran a la perfección con el resto de los elementos del jardín.
Pese a que es una buena opción para no generar contaminación visual, no supone una solución duradera para los jardines. Es que, al ser materiales vivos, se deben sustituir periódicamente para evitar fisuras y caídas.
Combinar material con plantas
Una forma para combinar la naturaleza con el material es usar una pérgola de hierro con enredaderas. Lo que sí, hay que tener en cuenta que se debe mantener las plantas, lo que San Juan en verano se complica un poco. Por esto, es importante elegir enredaderas que sean aptas para el clima árido seco y no necesiten agua en demasía.