Política
El lunes 16 se retoma el jury contra el juez Flores
El nuevo Jurado de Enjuiciamiento lo definió ayer. Hay que definir defensor oficial y el magistrado, hacer su descargo.
El caso del juez Pablo Flores volverá a ganar espacio en la agenda pública a partir de la semana que viene. Tras la feria judicial de verano, los nuevos miembros del Jurado de Enjuiciamiento fueron puestos en funciones y fijaron una sesión para dentro de 7 días con el objetivo de retomar el tratamiento del pedido de destitución que pesa contra el magistrado por su actuación en el escándalo del depósito judicial de vehículos. El primer paso: definir un defensor oficial.
Flores quedó en el ojo de la tormenta el 21 de octubre del año pasado, cuando el juez interino Juan Pablo Ortega pidió que sea removido del cargo para que se quede sin fueros y poder indagarlo en la causa que investiga una serie de irregularidades cometidas en el depósito de vehículos oficiales. El planteo comenzó a sustanciarse, pero hubo un par de excusaciones que lo dilataron y todo quedó para este año.
El Jurado de Enjuiciamiento volvió a constituirse este lunes, con los nuevos miembros: el cortista Daniel Olivares Yapur (presidente), los abogados Lidia Reverando y Marcelo Navas y los diputados Juan Carlos Abarca y Fernanda Peredes. Lo primero que hicieron fue convocar a una sesión el lunes 16 de este mes, para meterse de lleno con el caso Flores.
Lo primero que harán es resolver la excusación de dos defensores oficiales, para definir si a alguno le corresponde asumir la defensa de Flores o si hace falta designar otro. Después, viene una seguidilla de pasos que determinarán si el proceso continúa o se cae: correrle visita al magistrado para que se defienda, resolver si admiten o no la denuncia y en caso de darle trámite, mandar las actuaciones al fiscal General, para que decida si acusa lo acusa o no.
La fiscal Claudia Salica y Ortega quieren sentar a Flores en el banquillo de los acusados, al entender que podría estar involucrado en la causa del depósito oficial. El principal apuntado en ese escándalo es el encargado del depósito y comisario Gustavo Padilla, quien reconoció que usaba para cuestiones personales una camioneta que le había dado ilegalmente el magistrado.
La camioneta en cuestión era parte de una investigación judicial y Flores la cedió a pesar de que eso es una facultad exclusiva de la Corte de Justicia. Además, sostiene la fiscal, la causa era claramente de jurisdicción federal y el juez debía declararse incompetente.