Glencore Pachón ayudó a un innovador proyecto tecnológico en Villa Calingasta

Gracias al apoyo de Glencore Pachón, una importante propuesta educativa y tecnológica se lleva a cabo en Villa Calingasta. El proyecto, encabezado por la docente de nivel secundario Sonia Guzmán, trata de un trabajo en conjunto entre alumnos de forma transversal a través de lentes de realidad virtual, aumentada y hologramas. La iniciativa se llama “Transforminers”, siendo una propuesta interdisciplinaria y transversal para diferentes espacios curriculares desde el 1º hasta el 7º año de la escuela, para la cual los alumnos crearon robots que se convertían en vehículos fuera de ruta.

Guzmán es la encargada de dictar las materias de Informática y Tecnología de la Información y la Comunicación (TICs) en la Escuela Secundaria Técnica Nº 1 General Manuel Savio de un modo que logra incentivar a sus alumnos a través del abordaje pedagógico que atiende sus intereses. En 2017 la docente comenzó a trabajar con sus alumnos, que llegan también de localidades vecinas como Alcaparrosa, La Isla y Villa Colón, en un proyecto de realidad virtual que abría las puertas a una innovadora e inspiradora forma de educar y de aprender conceptos, procesos e información de valor.

El inicio no fue fácil, pero no le faltó perseverancia: lentes de cartón, anteojos en desuso de los abuelos del alumnado o botellas plásticas llenas de agua, fueron algunos de los elementos y las estrategias que utilizaron en clase para dar sensación de aumento. También aprovecharon placas radiográficas que lavaban con lavandina para crear hologramas. Pero los lentes artesanales que los chicos llevaban a diario en sus mochilas se deterioraron rápidamente.

Al pasar por la oficina de Glencore Pachón, la profesora intuyó que su iniciativa sería acompañada, en tanto que uno de los ejes de desarrollo del Programa Comunitario de la empresa es la educación. La docente fue bien recibida y presentó el proyecto para evaluación del área de Relaciones Comunitarias. “Ese mismo año fuimos a Buenos Aires a presentarlo en Tecnópolis”, rememora la docente con el entusiasmo intacto por la buena recepción que tuvo en la empresa.

Así fue como, en 2018, Glencore Pachón donó 35 lentes de realidad virtual a la institución, dispositivos que hoy siguen disfrutando sus alumnos. El apoyo de la empresa minera sumado al del director de la escuela, Alejandro Ponce, multiplicó la cantidad de niños y jóvenes beneficiados en el departamento de Calingasta.

Sobre los lentes de realidad virtual, Guzmán comentó que lo más importante es que los chicos se sintieran importantes, que dejaran de ser alumnos rurales que desconocen la tecnología. “De Villa Calingasta a San Juan hay 210 kilómetros, pero sí de las posibilidades entre los jóvenes de ambas ciudades se trata, a veces la distancia es mayor”, detalló. “La distancia duele. Porque mientras uno los aplaude en el aula, se sienten bien, pero a la larga se dan cuenta de que siguen en el mismo lugar”, abundó

Visión del proyecto

Con respecto a la visión del proyecto, la profesora agradeció que a través de Glencore Pachón se extendió el proyecto de RV, realidad aumentada y hologramas en el nivel inicial, primario y secundario de escuelas públicas (algunas privadas y hasta el Instituto Superior de Formación Docente San Buenaventura) de Calingasta, Palmerías y Barreal. “Allí organizamos jornadas educativas, que se completaron este año, en las cuales, mientras yo capacitaba a los maestros o profesores, mis alumnos hacían lo propio con los estudiantes”, explicó.

Guzmán sostiene que es fundamental estimular el aprendizaje mediante el uso de herramientas actuales, como las que ofrece la tecnología. Para ello, toman como base a la forma en la que los jóvenes perciben el mundo de un modo más dinámico, integral y multifocal que las generaciones anteriores. También asegura que la educación debe adaptarse a los alumnos y no a la inversa.