Las vacaciones de verano en Búzios, Cancún y Santiago de Chile son más baratas que en la convertibilidad

Con las vacaciones de verano a la vuelta de la esquina, muchos argentinos están considerando nuevos destinos para disfrutar de su tiempo libre. Según un informe de la consultora Econviews, la situación económica ha llevado a algunos a optar por lugares internacionales como Búzios, Cancún y Santiago de Chile, que se presentan como opciones más accesibles en comparación con destinos locales tradicionales.

El incremento en el costo del dólar turista, que se apreció un 76% este año, ha hecho que los viajes al exterior sean más tentadores. A la par, el peso argentino ha mantenido una devaluación mensual del 2% desde inicios de 2024, lo que ha desalentado el turismo receptivo y ha fomentado el turismo emisivo. Esto podría traducirse en menos turistas extranjeros en Argentina, con una caída del 30% en la llegada de visitantes internacionales, mientras que los viajes al extranjero aumentaron un 25% interanual.

Las redes sociales también dan cuenta del descontento de algunos turistas internacionales con los precios de la Ciudad de Buenos Aires, especialmente antes de eventos importantes como la final de la Copa Libertadores, donde se observó que muchos brasileños expresaron su preocupación por los costos elevados, comparándolos con años anteriores.

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Comparando precios, un paquete turístico a Santiago de Chile, que incluye 7 días y 6 noches en un hotel tres estrellas, tiene un costo de 401.433 pesos por persona. En cambio, un viaje a San Carlos de Bariloche, con 6 días y 5 noches en hotel tres estrellas, cuesta 395.076 pesos. Por otra parte, un viaje a Búzios, con 10 días y 9 noches en un hotel de dos estrellas, asciende a 697.858 pesos, mientras que Mar del Plata, con un paquete de 6 días y 5 noches, tiene un precio de 502.984 pesos. En contraste, el viaje más caro corresponde a Cancún, donde se ofrecen 10 días y 9 noches con un costo total de 1.770.739 pesos.

La situación cambiaria actual, en la que el cambio con el real brasileño, el peso chileno y el peso mexicano se encuentra similar a los niveles de principios de la década del 2000, refuerza la idea de que muchos argentinos podrían optar por vacacionar en el extranjero, buscando mantener su poder adquisitivo y descubrir nuevos destinos.

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