Identificar 6.000 paradas: uno de los desafíos de los que depende la Red Tulum

Empezó enero y la fecha límite de la puesta en marcha de la Red Tulum sigue siendo finales de febrero, por lo que en menos de dos meses tienen que estar funcionando el nuevo sistema de transporte público. Mientras se acerca la fecha, un grupo de 12 personas se encuentra abocado a una sola y compleja tarea: identificar, nombrar y geolocalizar más de 6.000 paradas.

Ubicar en el mapa cada parada una de las herramientas indispensables para que la red funcione. Esto se debe a que los usuarios deben tener definido por dónde y en qué horarios pasarán los colectivos y para eso debe estar funcionando la aplicación, que utiliza la base de datos que están armando.

Carlos Romero, director de Tránsito y Planeamiento, es quien coordina este trabajo y asegura que se ha convertido en un proceso lento y complejo. Esto se debe a que en la actualidad las paradas no estaban bien definidas, sobre todo en la periferia. En total son más de 22.000 puntos de encuentro, ya que por cada parada pasan más de una línea.

Hoy cada municipio utiliza un diseño diferente, pero quiero unificar (Imagen archivo DIARIO HUARPE)

Los trabajadores deben ubicar por GPS el punto, definir qué líneas pararán y luego se sumarán las frecuencias y horarios. Además se le debe dar un nombre a cada una y para eso tenían formatos diferentes para hacerlo.

En Mendoza o Buenos Aires, por ejemplo, cada parada se identifica por la calle y el número. Esta opción quedó descartada porque concluyeron que para los usuarios no iba a ser tan fácil reconocer punto sólo con estos datos, ya que quedarían, por ejemplo, nombrados como “Córdoba 700 este”.

Según adelantó Romero, en San Juan identificarán las paradas por los cruces entre calles, entonces se llamarán, por ejemplo “Córdoba y Caseros”. Para esto también deben elegir cómo denominar la calle para que sea más fácil reconocerla. “No es lo mismo poner Paula Albarracín de Sarmiento y General Libertador San Martín que poner ‘parada Libertador y Paula’”, detalló el funcionario. Los técnicos buscan definir nombres que sean fácilmente identificables y recordables.

Cuando toda esta información esté online la aplicación permitirá al usuario elegir el recorrido, tomar el colectivo y además saber los horarios de partida y llegada. Tránsito también realizará folletería y en la infraestructura habrá información física.

La infraestructura, con algo más de tiempo

Además de tener listos los colectivos, la aplicación con toda la información y las estaciones de transbordo, Tránsito también debe hacer una fuerte inversión en la infraestructura de las paradas. Pero ya quedó definido que no todo estará para la fecha del lanzamiento, sino que se irán sumando a lo largo los puntos de ascenso y descenso que tendrán distintas categorías.

Poste con información: serán los más parecidos a las paradas actuales, con la información de las líneas, pero también sumará una tabla de horarios. Estos estarán destinados a los lugares con menos densidad de pasajeros y en zonas periféricas.

Tótems: son volumétricos y modulares. Esto quiere decir que a una estructura básica se le irán sumando elementos como pueden ser basureros, sensores electrónicos, carga por energía solar, cargadores de baterías o luces.

Paradas con refugios: incluirán la tecnología de los tótems, ya que estos últimos son parte de la estructura. Estos sumarán más información y se verán en zonas con más densidad poblacional y por donde pasen varias líneas de colectivos.

Bulevares: tendrán un diseño especialmente vistoso, cubiertos de perfil circular y también incorporarán las utilidades de los anteriores.

Paradas en las plazas departamentales: uno de los desafíos que irá incorporándose luego del arranque de la Red. Es que en los espacios verdes de los municipios Tránsito trabajará para armar estructuras cómodas que podrían o no estar a cargo de las intendencias. Aun así, el objetivo es que el diseño sea estandarizado y que la fabricación se pueda hacer en talleres metalúrgicos locales.

Estaciones de transbordo: son las estructuras más grandes y una de las razones por la que la Red Tulum tuvo que aplazar su inicio, ya que son fundamentales para el uso de la red.