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La caída de Elías Piccirillo: de los lujos en Puerto Madero al aislamiento en una celda de Ezeiza
El empresario y expareja de Jesica Cirio enfrenta cargos por estafa, lavado de dinero y presuntos vínculos con el narcotráfico. Su detención expone un giro radical: de oficinas exclusivas y autos de alta gama a la soledad en prisión.
POR REDACCIÓN
Elías Piccirillo, empresario y expareja de la modelo Jesica Cirio, atraviesa uno de los momentos más críticos de su vida. Acusado de estafa, lavado de activos y supuestos vínculos con el narcotráfico, pasó en cuestión de días del confort de Puerto Madero y Nordelta a una celda del penal de Ezeiza, donde cumple prisión preventiva mientras avanza la investigación en su contra.
El caso tomó notoriedad tras revelarse que Piccirillo habría montado una falsa denuncia contra un acreedor, a quien debía una importante suma de dinero. La maniobra, según las primeras investigaciones, consistió en plantar droga y armas en el vehículo del denunciante, en un operativo presuntamente orquestado desde el Palacio Duhau, con la colaboración de un ex comisario apodado “Charly”.
Durante su ingreso al penal, Piccirillo debió ser asistido por una crisis de salud. “Está muy deprimido, muy mal”, aseguró la periodista Mercedes Ninci. Imágenes previas a su detención muestran al empresario en una oficina de alto nivel, fumando un habano, rodeado de papeles y teléfonos móviles, una postal que contrasta fuertemente con la rutina actual que lleva tras las rejas.
Testimonios desde el penal indican que pasa largas horas sentado, aislado del resto de los internos y con la mirada perdida. “No interactúa con nadie y se lo ve muy preocupado”, relató uno de los agentes penitenciarios. Otro interno agregó: “Parece que está repasando todo lo que hizo para terminar acá”.
La causa, que ya cuenta con el levantamiento del secreto de sumario, continúa sumando elementos probatorios: cruces de llamadas, movimientos bancarios sospechosos y una conexión con Francisco José Hauque quien fue detenido con droga y un arma de fuego el mismo día que Piccirillo organizaba una cena privada.
Además, circula un video en redes sociales donde se lo ve escapando apresuradamente de su vivienda en Nordelta justo cuando la Policía llegaba a allanar su domicilio, imagen que reforzó las sospechas sobre su conducta.
Por su parte, Jesica Cirio intenta tomar distancia del escándalo. La modelo se habría mudado de su casa en Nordelta para evitar la presión mediática, aunque su nombre sigue siendo mencionado en el expediente, donde también se investiga el accionar de una división de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires.
El proceso judicial continúa en marcha y se esperan nuevas medidas procesales que podrían ampliar el alcance del caso. En tanto, Piccirillo enfrenta no solo la posibilidad de una larga condena, sino también el derrumbe de una vida de lujos que, hasta hace poco, parecía intocable.
Fuente: Cadena 3