Judiciales
La esteticista acusada de prostitución, en libertad y a la espera de las pruebas
Patricia Coria y su hija esperan la siguiente audiencia, donde se pondrán en evidencia las pruebas recolectadas en su negocio.
Por David Silva
Patricia Coria, la dueña de la estética Eros For Men y acusada de promoción de la prostitución tras la denuncia de una exempleada, está libre. La mujer pagó la caución real de $200.000 y ya no ocupa un lugar en las celdas de los calabozos de la Comisaría 3º.
Aunque está libre, sigue ligada a la causa que la acusa de facilitar servicios sexuales a eventuales clientes en lo que era aparentemente la fachada de una estética y centro de masajes. Por su parte, la hija de Coria, Natalia Pablo de 29 años, también recuperó su libertad tras pagar la caución real que le impuso el juez de Garantías Andrés Abelín Cottonaro, de $80.000.
Esta última se encuentra ligada al legajo que comparte con su madre por coparticipación de promoción de la prostitución. Es que la joven que estudia para ser coach de crossfit trabajaba como secretaria en la estética. Y según las ahora exempleadas del lugar, esta encubría la actividad de su madre y tras ser detenida Coria, las llamó por teléfono para que testifiquen a su favor.
El pasado 13 de mayo, y por pedido del fiscal Juan Manuel Gálvez, de la Unidad Fiscal Cavig (Centro de Abordaje de Violencia Intrafamiliar y de Género), clausuraron al estética ubicada en calles 25 de mayo antes de Mendoza. Allí, realizaron la segunda recolección de pruebas, entre ellas la de computadoras, pen drive y recibos que se encontraban en el lugar. Estos servirán para comprobar que tipo de actividad se realizaba en el lugar, y si se condicen con la denuncia de la joven de 19 años, donde asegura se ofrecía servicios sexuales.
Desde fiscalía aseguraron a DIARIO HUARPE que ya casi tienen todo cerrado para pedir la condena para Coria y su hija: esta podría ir desde los cinco hasta los 10 años de prisión efectiva en el penal de Chimbas. Por supuesto, en caso de ser halladas culpables. Aún quedan testigos por entrevistar pero todo daría cuenta que esa Unidad ya tendría cerrado el caso.
Por su parte, y en su audiencia de presentación ante el juez de Garantías, Coria y su hija apuntaron contra la denunciante a la que tildaron de “inestable”. Alegaron que incluso se solidarizaron con ella en varias oportunidades cuando no podía comer o le faltaba dinero. La hija de Coria, Pablo, llegó a decir que “la consideraba una hermana”.
Pero esto no impidió que la joven denunciara a Coria el pasado 8 de mayo y a la estética por obligarla, supuestamente, a dar masajes con el torso descubierto. En algunas oportunidades desnuda y, según la denuncia, sufriendo el acoso y “manoseo” de los clientes que accedían a un catálogo que tenía sesiones masturbatorias y hasta de penetración.
Con las pruebas reunidas, restan ahora los alegatos y será la Justicia quien decida el futuro de las mujeres.