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Mujeres salvaron a otra de ser golpeada por su expareja
La víctima era agredida por el hombre en el frente de una casa. El agresor terminó condenado.
POR REDACCIÓN
NOTA DEL EDITOR
Importante
Si sufrís violencia de género o abuso sexual llamá al 911 o 144. También podés acercarte por el Centro de Abordaje de Violencia Intrafamiliar y de Género (Cavig), que está situado en Rivadavia 425 oeste, justo en la esquina con Alem, en Capital. Teléfonos: 264 4222321 o 264 4210013.
Dos mujeres, que viajaban en un auto, vieron a una a un hombre insultando y forcejeando a su expareja en el frente de una casa, en Capital. Ante esto, ambas salieron del vehículo, salvaron a la víctima de su agresor, metiéndola en el automóvil y cerrándole el paso al atacante. Cuando la Policía y personal de fiscalía llegaron al lugar, el agresor no quería salir de la vivienda.
Al detenido lo identificaron con las siglas F.J.T.M. Un juez del Sistema Especial de Flagrancia lo condenó a seis meses de prisión condicional por el delito de lesiones agravadas en contexto de violencia intrafamiliar y amenazas. El arrestado llegó a un acuerdo de juicio abreviado y posteriormente recibió la pena.
La sentencia del magistrado establece que el hombre puede cumplirla en libertad, pero tiene prohibido contactarse con su víctima y de acercarse a ella a menos de un radio de 200 metros, entre otras reglas de conducta. También fue excluido del hogar.
El juez, después de dictar la condena, remitió el expediente al Juzgado de Familia de turno.
El episodio violento ocurrió el viernes a las 2 aproximadamente. Tanto la víctima como el victimario se encontraban durmiendo en el piso, sobre unas colchas. La denunciante deseó en un momento ir al baño y, sin querer, se apoyó sobre la pierna de F.J.T.M. Por ello, el hombre la increpó, aduciendo que le quería revisar los bolsillos y sacarle plata. Pero no se quedó en la acusación, luego la insultó y dio tirones sobre su cartera, mientras ella trataba de irse de la casa. La hizo caer al suelo y le rompió la correa del bolso.
La violencia aumentó cuando el hombre le agarró del cuello y la llevó hasta las rejas de la casa, que pertenece a su padre. Ahí la situación continuó con insultos y forcejeos hasta que llegaron las mujeres salvadoras.
Las automovilistas fueron las que llamaron al 911. De esa manera, el caso arribó a la Policía y a la Justicia.