Por una carta, el hombre acusado de quemar y tratar de matar a su pareja seguirá detenido

Sebastián Exequiel Quiroga, de 25 años, acusado de quemar y tratar de asesinar a su pareja en Chimbas, intentó este lunes cambiar su situación procesal. El imputado por homicidio agravado en grado de tentativa está hace cinco meses preso en el Servicio Penitenciario Provincial y sus abogados quisieron revocar la prisión preventiva por la excarcelación o arresto domiciliario, pero no lo consiguieron.

La jueza de garantías Verónica Chicón determinó que Quiroga siga detenido hasta que inicie el juicio. La fiscalía Cavig argumentó este lunes en la audiencia de revisión de medida cautelar, llevada a cabo en la Sala 6 del subsuelo de Tribunales, que el acusado trató de influir en la víctima a través de una carta que le mandó a sus tres pequeñas hijas que tienen en común de 11, seis y cuatro años. El cuerpo de fiscales, liderada por la fiscal coordinadora Claudia Salica, indicó que esto debe ser entendido como un entorpecimiento al desarrollo del proceso y la investigación.

Chicón hizo lugar a lo solicitado por Cavig. Los abogados de Quiroga, Daniela Reus Ruíz y Daniel Lorente Ormeño se opusieron a lo expresado por el Ministerio Público Fiscal (MPF) y manifestaron que no existe el entorpecimiento a la Justicia y además no hay peligro de fuga del sospechoso.

Desde el entorno de la defensa confirmaron a DIARIO HUARPE que apelará el fallo yendo a la instancia de impugnación. Además, revelaron que las pruebas contra el imputado no son fehacientes y que tienen forma de probarlo.

El presunto ataque de Quiroga a su pareja de 29 años ocurrió en julio en el fondo de una vivienda, ubicada en Villa Videla, Chimbas. El detenido vivía con su pareja y sus tres hijas en una casa lindante a su suegra. Aparentemente, según los investigadores, el acusado discutió con su víctima y luego le tiró un líquido inflamable para prenderle fuego. Sin embargo, la defensa del hombre sostiene que esto no fue así y expondrá su teoría del caso en la audiencia de control de acusación, etapa previa a la elevación a juicio.

La pareja estaba con su hija de cuatro años como testigo cuando el ataque sucedió, supuestamente. Las hijas más grandes estaban con sus abuelos, según la primera información del hecho. Las cámaras Gesell a las niñas ya fueron realizadas en el Centro Anivi y son parte de la prueba recolectada por Cavig.