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Vecinos de dos barrios de Chimbas llevan meses sin agua y entre líquidos cloacales
Desde hace meses, los vecinos del barrio 2 de Abril y la villa Mariano Moreno de Chimbas tienen serias dificultades con el suministro de agua, y encima las cloacas colapsaron, invadiendo calles y cunetas con aguas servidas.
POR REDACCIÓN
Los vecinos del barrio 2 de Abril y la villa Mariano Moreno de Chimbas se encuentran viviendo en condiciones indignas. Es que, desde hace al menos unos ocho meses, no cuentan con presión en el suministro de agua potable, lo que les imposibilita un acceso normal al elemento vital. Además, como es frecuente, las cloacas colapsaron una vez más, regando de aguas servidas las calles y cunetas de estas comunidades.
DIARIO HUARPE dialogó con las vecinas Lorena Chacón y Jenifer González, quienes relataron cómo es el duro día a día que se vive en estas zonas por las condiciones expuestas. Si bien aseguran que el problema con el suministro de agua es histórico, afirman que desde principios del 2024 la situación empeoró.
Según explican, en estos barrios que se encuentran emplazados hacia el Este y el Oeste de Ruta Nacional Nº 40, a la altura del Callejón Blanco, en el departamento Chimbas, es una lucha constante ver que no suba agua a los tanques y que el suministro se corte de pronto. La respuesta que dieron desde Obras Sanitarias Sociedad del Estado (OSSE) a los vecinos es que no es buena la presión en la zona, pero los habitantes de estos barrios desconfían de ese argumento, y deslizan la posibilidad de que se trate de una clara falta de inversión, ya que las bombas que abastecen a estas barriadas no tiene un funcionamiento eficiente.
Antes en el invierno o incluso en las noches entraba algo de agua a los tanques porque son momentos en que la gente consume menos, pero ahora ni siquiera podemos contar con eso. Ya hasta creemos que apagan las bombas”, sentenciaron.
En este sentido, explicaron que esta problemática dificulta tareas cotidianas como lavar ropa, bañarse, cocinar o incluso tirar la cadena del inodoro. A su vez, destacan que es usual que a vecinos se les rompan artefactos como lavarropas, calefones y termotanques por la falta de ingreso de agua a los mismos, y afirman que para calentar agua deben hacerlo en ollas.
Asimismo, denuncian que camiones del municipio sacan agua del barrio para ser usada en riego, y eso empeora aún más su problema. Para contrarrestar la dramática situación, muchos de ellos optan -en el mejor de los casos- por comprar agua embotellada, o aprovechan los momentos en que hay presión para abastecerse llenando baldes y tachos. Incluso, algunos de ellos tuvieron que comprar bombas para poder contar con un suministro reducido.
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Por otra parte, existe otra problemática preocupante; aguas servidas en calles y cunetas. Según explican estas vecinas, es habitual que las cloacas colapsen, generando un ambiente nauseabundo y peligroso para la salubridad de estas comunidades.
Vale destacar que al tomar conocimiento de esta situación, este diario se puso en contacto con OSSE, quienes aseguraron estar respondiendo a las decenas de reclamos provenientes de esta zona. De hecho, durante la mañana de este jueves, una cuadrilla llegó a estos barrios y realizó trabajos que permitieron reducir el nivel de las aguas servidas, pero los vecinos no quedaron conformes.
“Han destapado y ha bajado el agua servida, pero no sabemos cuánto va a durar. Entendemos que es un arreglo provisorio. Dicen que las cañerías estaban tapadas de grasa, pero creemos que el problema es mayor, y su solución implica una inversión que probablemente no quieren hacer en nosotros”, denunciaron.