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A 25 años del atentado de la AMIA, herida abierta que no consigue justicia
La tragedia dejó como saldo 85 muertos. Desde entonces, la investigación judicial no llegó a buen puerto. Todavía los culpables no son juzgados ni sentenciados.
POR REDACCIÓN
En pocos minutos, el dolor cubrió el país. Entonces no había redes que viralizaran la noticia. Sin embargo, las primeras imágenes de los noticieros televisivos fueron desgarradoras. En la mañana del 18 de julio de 1994, una carga explosiva detonó frente al edificio donde funcionaba la AMIA (Asociación Mutual Israelita Argentina), en Buenos Aires. Fue el mayor atentado terrorista de la historia de este país, que dejó un saldo de 85 muertos y más de 300 heridos.
Esto sucedió después de muchas advertencias ante la posibilidad de un nuevo atentado por parte de Irán y sus secuaces de Hezbolá, tras el ataque contra la Embajada de Israel, en 1992, también en Buenos Aires.
Pero a 25 años de ocurrido, el caso AMIA no termina de esclarecerse, a pesar de las declaraciones de compromisos de los gobiernos de turno. Uno de los avances concretos a la hora de explicar el móvil y los participantes internacionales, fueron las investigaciones llevadas a cabo por el fiscal Alberto Nisman, cuya muerte sorpresiva, que aún sigue siendo un misterio. Nisman afirmaba que las autoridades iraníes eran autores intelectuales del atentado.
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Más de dos décadas han pasado y no hay acusados que hayan declarado, mucho menos que hayan recibido una sentencia. Ahora, el Gobierno de Mauricio Macre, puso en marcha una serie de medidas en busca de que Irán acepte su culpabilidad y colabore con la Justicia Argentina.
Así es que en el marco de la conmemoración de los 25 años de esta tragedia, el Gobierno lanzó tres decretos.
El primero crea un registro de organizaciones terroristas, el segundo establece duelo nacional en conmemoración del ataque a la mutual judía y el tercero, una nueva indemnización para las víctimas que aún no habían podido acceder a ese beneficio.
En San Juan, este jueves, a las 9,53, hora en que se produjo el atentado, harán sonar sirenas de patrulleros policiales apostados en la Gobernación y lugares estratégicos de toda la provincia. Además, por pedido al Arzobispado de San Juan, en los templos habrá un tañido de campanas.