Balacera y muerte en Pocito: sospechosos continuarán detenidos

La Justicia de San Juan se encuentra trabajando en la investigación de la balacera en Pocito que terminó con la vida de Juan Ignacio Martínez en el interior del barrio Teresa de Calcuta durante el pasado viernes en la madrugada. Por esta razón el juez de garantías, Matías Parrón resolvió en una audiencia que tuvo lugar en la jornada de este último domingo que los sospechosos detenidos por el crimen, Walter Agustín Barahona y Braian Guajardo continúen encerrados durante seis meses más, mientras avanza la investigación.

Según lo resuelto en la audiencia de formalización, los detenidos continuarán en prisión, ya que para la UFI Delitos Especiales representada por el fiscal Adrián Riveros, ambos detenidos son los principales sospechosos de acabar con la vida de Martínez. En ese contexto, fue que Barahona y Guajardo quedaron imputados por el delito de homicidio simple agravado por el uso de arma de fuego en calidad de coautores.

En diálogo con la prensa, Riveros dijo que el autor del disparo que mató al joven de 18 años aún no ha sido identificado. Por este motivo se están realizando pericias caligráficas y genéticas para determinar quién fue el responsable.

“Entendemos que hubo disparos cruzados, porque se encontraron vainas y proyectiles en el interior de la vivienda como también fuera de la vivienda, en la vereda, lo que nos hace presumir de que hubo disparos cruzados y que todavía aun no teniendo las pericias no podemos definir con precisión quién fue el autor del delito”, agregó.

Fueron más de 20 tiros los que se efectuaron esa madrugada y uno de esos balazos dio en el pecho de Martínez, provocándole la muerte en el acto. Por otra parte, se sigue investigando si hay otros sospechosos involucrados. Se ha imputado a Barahona y se está analizando si estuvo dentro o fuera de la vivienda durante el incidente.

Durante la audiencia uno de los detenidos hizo uso de la palabra. “Barahona señaló que se defendió al ataque de otras personas, lo que nos hace presumir de que había dos grupos como veníamos señalando, sin todavía poder descartar ninguna de las hipótesis. Al señalar esto, el imputado da cuenta de esa posibilidad”, amplió Riveros.

Con la hipótesis planteada y con los elementos de convicción recolectados hasta ahora, Fiscalía solicitó un plazo de 6 meses para investigar el caso y el mismo plazo para que los dos acusados queden tras las rejas, ya que los dos en libertad podrían entorpecer la investigación de esta causa que es muy compleja. Los abogados defensores se opusieron a la prisión preventiva.

Finalmente, el magistrado imputó provisoriamente a Barahona y Guajardo por el delito de homicidio simple agravado por el uso de arma de fuego en calidad de coautores, les dictó la prisión preventiva por 6 meses (la cumplirán en la comisaría donde fueron alojados, primeramente) y el plazo de 6 meses para la IPP.