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Brutal golpiza a un joven sanjuanino a la salida de un boliche
Al parecer el grupo de jóvenes tuvo un cruce de palabras con el DJ del boliche, lo que provocó que los patovicas los echaran a la fuerza y dándoles una golpiza.
El pasado 15 de junio, un sanjuanino de 24 años decidió festejar su noche de cumpleaños en el boliche Olivia, ubicado sobre calle General Acha y General Mosconi, en Rawson. El joven no sabía que esa noche tendría el peor final, ya que fue brutalmente golpeado por los patovicas que le ocasionaron varias fracturas en la zona del tabique y múltiples traumatismos.
La madre del joven, Ivana Moreno, indignada con la situación, explicó a DIARIO HUARPE que hizo la denuncia correspondiente ante las autoridades, pero también decidió hacer pública las caras de los denunciados a través de un posteo en su Facebook.
Según la mujer, su hijo y su grupo de amigos fueron a ese boliche para festejar la noche de su cumpleaños. Cuando en un momento de la jornada, los jóvenes comenzaron a pedirle una canción al DJ. El trabajador hizo caso omiso ante el pedido de los jóvenes y pidió a los encargados de seguridad que los retiraran porque, según afirmó, lo estaban molestando.
“Entre cinco patovicas agarraron a mi hijo, lo llevaron a un lugar donde no hay cámaras para golpearlo y lo sacaron”, dijo Moreno.
Fue tal la golpiza que el joven salió del boliche desmayado. Moreno señaló que uno de los amigos que no se metió en la trifulca y aprovechó para ver toda la situación, pidió por favor que le dejaran de pegar porque ya estaba en el piso. Los golpes fueron con un bastón rígido de aluminio o metal similar a la tonfa utilizadas por los policías, dijo la denunciante. Y fueron propiciados a la altura de la espalda media y en el tabique, lo que produjo el desmayo del joven de 24 años.
La víctima de la golpiza terminó con una fractura de costillas y múltiples fracturas en el tabique que complicaron su respiración. La familia hizo la denuncia en la sección de Seguridad Personal de la Policía de San Juan. Según la madre, desde el primer día tienen identificados a los autores del hecho y todavía no ocurre nada.
“Estas personas siguen con sus vidas como si nada y mi hijo no puede ni trabajar ni entrenar, por lo que le hicieron un grupo de malditos”, concluyó Moreno.