Con un Zárate imparable, Boca venció a Paranaense por 3-1 en San Juan

Tal cual sucedió el pasado jueves, Boca se presentó en el Estadio San Juan del Bicentenario ante una multitud de hinchas quienes llenaron cada rincón de las tribunas del gigante de Pocito alentando por el equipo de su pasión.

El encuentro frente a Atlético Paranaense fue el cierre del fútbol internacional de verano en la provincia a una semana de la reanudación de la Superliga que tiene al xeneize en los puestos de vanguardia con 29 puntos y que el próximo domingo lo enfrentará a Independiente como local.

El técnico Miguel Ángel Russo sorprendió con la formación que dispuso para este segundo partido amistoso ya que decidió enviar a la cancha a un mix de titulares y suplentes, entre ellos el lateral izquierdo sanjuanino Emmanuel Mas y también la única incorporación que hasta ahora logró concretar, el mediocampista “Pol” Fernández.

La semana pasada frente a Universitario de Perú, Boca ganó pero no dejó una imagen convincente, en especial durante el primer tiempo. Recién en la segunda etapa logró destrabar el marcador a su favor.  

De la misma forma comenzó este domingo. Sin precisión entre líneas, perdió el dominio de la pelota rápidamente ante una buena presión ejercida por Paranaense. Sobre  todo, el manejo del balón por parte del argentino “Lucho” González desesperó a la mitad de cancha boquense.

Pese a esto, una jugada que derivó por la izquierda del ataque xeneize permitió el primer gol del partido. A los 18 minutos del primer tiempo, “Bebelo” Reynoso tomó la pelota y quiso dar un pase hacia el medio, pero rebotó contra un defensor y le volvió a quedar en los pies. Rápido de reflejos, el volante creativo metió una estocada a la espalda de la defensa brasileña y Mauro Zárate lo aprovechó definiendo por debajo del arquero Santos.

Boca se tranquilizó tras el gol, pero 10 minutos después un exquisito pase filtrado ante una defensa xeneize en línea recayó en Nikao que hizo la diagonal, paró la pelota y se la picó ante la salida de Marcos Díaz para el 1-1.  

El encuentro se volvió de ida y vuelta hasta que a los 34 minutos una contra rapidísima volvió a darle la ventaja a Boca. Díaz descolgó un centro, le dio el pase a "Bebelo" que aprovechó su velocidad y le dio un pase profundo al juvenil Agustín Obando, quien levantó la cabeza y encontró una vez más a Zárate. El único delantero de área que puso Russo le respondió su confianza con otro gol: paró la pelota con la pierna derecha y sacó un fuerte remate al palo izquierdo del arquero brasileño.

En el complemento, el conjunto de Russo justificó la ventaja en el partido a partir de buena presión sobre la mitad de cancha y manejo de la pelota en un tiempo que casi no tuvo incidencias. Un poco también esto sucedió a partir de los cambios que generaron los equipos y que desvirtuaron el juego que se desarrolló en el primer tiempo.

La nota negativa para Boca fue la salida del goleador del encuentro, Mauro Zárate que recibió un golpe en una de sus piernas y por precaución fue a sentarse al banco de suplentes reemplazado por Carlos Tevez. 

Cuando el tiempo se terminaba, una recuperación de "Toto" Salvio en mitad de cancha posibilitó el tercer gol. Tevez pasó el balón hacia la derecha del área y Reynoso aprovechó para dominarlo, meter un par de regates que volvieron locos a los defensores y definir fuerte al medio. La pelota pegó en el travesaño, bajó y se metió en el arco para el 3-1 final. 

Boca cerró finalmente dos amistosos en San Juan que le sirvieron para pulir lo que el técnico quiere para encarar una dura temporada, con Superliga y Copa Libertadores como objetivos. Todavía le falta, pero indudablemente Russo le cambió el espíritu al xeneize y va camino a conseguir la identidad que los hinchas desean.