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El calvario de las adicciones: la historia de dos sanjuaninos que se recuperaron
Este martes, se realizó una entrega de diplomas a los sanjuaninos que formaban parte de las comunidades terapéuticas que aborda el consumo problemático de drogas. Dos sanjuaninos contaron sus historias de recuperación.
Por Sol Manzano
Dos sanjuaninos volvieron a resurgir luego de caer en adicciones y hoy, cuentan sus historias de cómo pudieron salir adelante, como así también de las metas que tienen. Durante la mañana del martes 10 de septiembre se llevó a cabo uno de los momentos más esperados y ansiados de toda persona que inicia un tratamiento por consumos problemáticos de sustancias, terminar el tratamiento y recibir el alta. Estos egresos tienen un gran valor simbólico, ya que representa un gran reto atravesado y la felicidad de llegar al objetivo. En esta entrega, dos sanjuaninos abrieron su corazón y contaron sus historias de recuperación. Estas historias se conocieron luego del acto que encabezó el ministro de Familia y Desarrollo Humano Carlos Platero y la directora de la Dirección de Consumos Problemáticos Daniela Merlo donde se entregó el certificado que da cuenta de que estas personas terminaron con su tratamiento terapéutico.
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Uno de ellos es F.R. quien mencionó a DIARIO HUARPE que comenzó el tratamiento por su consumo problemático con el alcohol. “El proceso fue muy duro, estuve en la comunidad del Proyecto Juan. Fue un proceso de seis meses y 10 días, donde los primeros meses fueron los más complicados”, mencionó el hombre quien calificó como un “calvario” los momentos iniciales de la rehabilitación.
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“Me pude amoldar por suerte y empecé a ver la realidad de otra forma, porque yo vivía dentro de una burbuja. Ahora puedo ver todo de otra forma y encontré toda la fuerza para salir adelante en mí. Tengo una enfermedad terminal y cada vez que tomaba era un día menos de vida”, expresó el sanjuanino.
Asimismo, mencionó que uno de sus pilares fundamentales es su familia y sobre todo su esposa. “Mi señora es quien me hace fuerte y agradezco tener el apoyo de mi familia”, dijo el hombre. También hizo hincapié en que se puso metas para salir adelante y una de sus metas es seguir con su trabajo, ya que él cuenta con una carpintería en el fondo de su casa, donde trabaja arduamente para poder subsistir cada día.
“Me jubilaron por el tema de mi enfermedad, pero lo mío es la carpintería. Lo que más me gusta hacer es cosas para los niños, como caballitos, aunque también trabajo todo lo que son los muebles”, finalizó diciendo.
Otro de los que estaba ahí era M.G., quien mencionó que él estuvo en el Hospital Marcial Quiroga y junto a una asistente social, se ofreció voluntariamente a internarse para llevar a cabo el tratamiento de rehabilitación. “Empecé en la casa María del Carmen y he estado desde febrero ahí hasta hace unas semanas”, explicó.
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Al igual que el primer hombre, hizo foco en que los primeros meses son los más complicados debido a que se desarrolla un estado de abstinencia que es difícil de sostener. Afortunadamente, M. pudo salir adelante y expresó que su pilar fundamental es su madre, quien desde un primer momento estuvo para apoyarlo siempre.
“Me gusta el deporte, el fútbol así que quiero seguir avanzando con ese tema, así trabajo como entrenador o director técnico de algún club”, dijo el sanjuanino, quien a su vez mencionó que está trabajando en su barrio para tener una escuelita de fútbol y así poder sacar cada vez más chicos de las calles.
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“La idea es crear un espacio de contención, para que los chicos no caigan en las adicciones, en las drogas, en el alcohol ni en el consumo de cigarrillos, sino mantenerlos en un ambiente de contención”, finalizó el joven.